2. • Las anfetaminas son sustancias
derivadas de la "Beta-fenil-isopropil
amina". Son drogas
medicamentosas, adictivas
(Moderada-Alta) y neurotóxicas. Las
más utilizadas son:
Benzedrina, Dexedrina y la
Metilanfetamina. son un fuerte
estimulante y se relaciona
inadecuadamente con todos los
deportes para disminuir la sensación
de fatiga. Una de sus aplicaciones
más usuales es como auxiliar en la
reducción de peso.
3. • Las anfetaminas son un
tipo de droga que
estimulan el Sistema
Nervioso Central. Se
presentan en forma de
pastillas o cápsulas de
diferente forma y color.
pueden ser legales si son
consumidas bajo un
estricto control médico, sin
embargo, el abuso de las
mismas se produce
cuando son adquiridas y
consumidas de manera
4. Efectos físicos
- Aumenta el estado de alerta.
- Comportamiento agresivo y violento.
- Aumento de energía y actividad motora.
- Sensación de bienestar.
- Aumento en la seguridad y confianza.
- Disminuye el sueño.
- Disminuye la fatiga.
- Aumenta la velocidad de pensamiento y
lenguaje.
- Se suprime la sensación de apetito.
- Aumento en la presión arterial. Aumento en
la frecuencia cardiaca.
- Aumento en la temperatura corporal.
- Estimulación de la corteza cerebral.
- Desincronización en el Electro Encefalograma
(E.E.G.)
- Disminución del sueño.
Los cambios conductuales
se presentan en:
- La agitación psicomotriz.
- Con sentimientos de
grandeza.
- Estados de alerta.
- Pleitos
- Deterioro en los procesos
de pensamiento.
5. • A dosis normales, sus efectos varían de
acuerdo al individuo y las condiciones de
ingesta. Pueden producir efectos
placenteros, hiperactividad y sensación
desbordante de energía, pero también
causan temblor, ansiedad irritabilidad, ira
inmotivada y repentina, trastornos
amnésicos e incoherencia. En la última fase
se describen depresión, cuadros paranoides
y delirios paranoides, alucinaciones y
trastornos de conducta.
• Tomadas en dosis importantes son
causantes de confusión, tensión, ansiedad
aguda y miedo. También pueden precipitar
psicosis paranoide en sujetos no psicóticos.
La psicosis anfetamínica desarrollada por el
sujeto se asemeja a la psicosis paranoica y
a la esquizofrenia paranoica.
• Las cuales suceden si sobrepasan la dosis
de los 2gr por vía endovenosa.
6. • La anfetamina es un agonista directo de los
receptores presinápticos para noradrenalina
(NA) y dopamina (DA) a nivel del sistema
nervioso central. La anfetamina se une a estos
receptores y los activa, induciendo la liberación
de los neurotransmisores de reserva alojados en
las vesículas de las terminales
nerviosas, convirtiendo los respectivos
transportadores moleculares en canales
abiertos. También tiene una acción agonista
serotoninérgica, aunque relativamente más
débil.
7.
8. • La clase de la anfetamina y las sustancia de acción
similar incluyen todas las sustancias con su estructura
feniletilamina sustituida, como; la anfetamina, la
dextroanfetamina y la metanfetamina. También incluyen
aquellas sustancias de estructura diferentes pero poseen
la acción similar a la anfetamina, como son el
metilfenidato y aneroxigenos.
• Se toman por vía oral e intravenosa, la anfetamina
también se consume por vía nasal.
• En las anfetaminas hay estimulantes naturales derivados
de plantas como el “khat” que pueden producir el abuso
o dependencia. Estos medicamentos son legales ya que
se pueden conseguir por prescripción al tratamiento para
la obesidad, del TDAH y para la narcolepsia.
9. Trastornos por consumos de anfetaminas
• F15.2x Dependencia de anfetamina
[304.70]
• F15.1 Abuso de anfetamina [305.70]
10. Los patrones de consumo
y curso para la
dependencia de
anfetamina son similares
a los de la cocaína
debido a que las dos
sustancias son potentes
estimulantes del sistema
nervioso central, con
efectos psicoactivos y
simpaticomiméticos
similares.
Sin embargo las
anfetaminas tienen un
efecto mas duradero
que el de la cocaína
y, en
consecuencia, son
autoadministradas
con menos frecuencia.
Se presentan tolerancia a
las anfetaminas, y esto
comporta un incremento
progresivo y sustancial de
las dosis, pero algunos
sujetos con dependencia
de anfetamina presentan
tolerancia inversa
(sensibilización). En estos
casos pequeñas dosis
pueden producir acusados
efectos estimulantes y otros
efectos mentales y
neurológicos adversos.
11. En la mayoría de los casos se presentan
problemas legales como resultado del
comportamiento durante la intoxicación por
anfetaminas (comportamiento agresivo), como
consecuencia de la obtención de la misma.
Ocasionalmente, los individuos con abuso de
anfetamina incurrirán en acciones
ilegales(manufacturación de anfetaminas, robo)
para obtener la droga; sin embargo, este
comportamiento es más habitual entre los sujetos
con dependencia.
Cuando estos problemas se acompañan con
demostraciones de tolerancia, abstinencia o
comportamiento compulsivo, se debe considerar
preferentemente un diagnóstico de dependencia
de anfetamina antes que de abuso de
anfetamina.
12. Intoxicación por anfetaminas
Intoxicación por alteraciones perceptivas
Abstinencia de anfetaminas
Delirium por intoxicación por anfetamina
Trastorno psicótico con ideas delirantes
Trastorno psicótico con alucinaciones
Trastorno del estado de ánimo
Trastorno de ansiedad
Trastorno sexual
Trastorno de sueño
Trastorno relacionado con anfetaminas no
especificado.
13. Es la presencia de cambios psicológicos o
comportamentales desadaptativos
clínicamente significativos que aparecen
durante o poco tiempo después del consumo
de anfetaminas
14. INTOXICACIÓN AGUDA
Sensación de bienestar
Aparición de euforia
Sensación de más vigor
Tendencia al contacto social
Hiperactividad
Inquietud
Hipervigilancia
Sensibilidad interpersonal
INTOXICACIÓN CRÓNICA
Embotamiento afectivo
Fatiga
Tristeza
Retraimiento social
Locuacidad
Ansiedad
Tensión
Estado de alerta
Grandiosidad
Comportamiento estereotipado y
repetitivo
Cólera - rabia - violencia
Deterioro del juicio
15. Taquicardia O Bradicardia
Dilatación Pupilar
Elevación O Disminución De La
Tensión Arterial
Sudoración O Escalofríos
Nauseas O Vómitos
Perdida De Peso Demostrable
Agitación O Retraso Psicomotor
Debilidad Muscular
Depresión Respiratoria
Arritmias Cardiacas
Crisis Comiciales
Discinecias
Distonias o Coma.
16. TRATAMIENTO
PARA LA
INTOXICACION
El tratamiento
consiste en dar
carbón activado
y laxantes
No están
indicados los
eméticos
El paciente
puede
necesitar
soporte
respiratorio
Las
benzodiazepina
s pueden ser
útiles para el
manejo de la
agitación
(lorazepam, o
midazolam)El midazolam es
también
efectivo en
caso de
convulsiones
Para la
hipertensión
están indicados
los
betabloqueante
s y el
nitroprusiato
Las arritmias se
abordan con
lidocaína o
propanolol
La
hipertermia, en
caso de no
poder
corregirse con
medidas
físicas, se trata
con dantroleno
sódico
También se contempla
la diuresis forzada
ácida, la hemodiálisis
en casos graves, y la
vigilancia de síntomas y
signos neurológicos, la
electrocardiografía y la
medición de cifras
tensionales
17. Este diagnóstico se realiza
cuando los criterios coinciden
con intoxicación por anfetamina
y alucinaciones con juicio de
realidad intacto o ilusiones
auditivas, visuales o táctiles en
ausencia de un delirium.
Cuando las alucinaciones
tienen lugar sin juicio de
realidad se aconseja un
diagnóstico de trastorno
psicótico inducido por
anfetamina.
18. A. Consumo reciente de anfetamina o sustancias afines (p. ej., metilfenidato).
B. Cambios psicológicos o comportamentales desadaptativos clínicamente
significativos (p. ej., euforia o embotamiento afectivo; cambios de la
sociabilidad; hipervigilancia; sensibilidad interpersonal; ansiedad, tensión o
cólera; comportamiento estereotipada; deterioro de la capacidad de juicio o
de la actividad social o laboral) que aparecen durante o poco tiempo después
del consumo de anfetamina o sustancias afines.
C. Dos (o más) de los siguientes signos y síntomas, que aparecen durante o
poco tiempo después del consumo de anfetaminas o sustancias afines:
1. taquicardia o bradicardia
2. dilatación pupilar
3. tensión arterial aumentada o disminuida
4. sudoración o escalofríos
5. náuseas o vómitos
6. pérdida de peso demostrable
7. agitación o retraso psicomotores
8. debilidad muscular, depresión respiratoria, dolor en el pecho o arritmias
cardíacas
9. confusión, crisis comiciales, discinesias, distonías o coma
D. Los síntomas no se deben a una enfermedad médica y no se explican mejor
por la presencia de otro trastorno mental.
Nota de codificación: Codificar F15.04 si Con alteraciones perceptivas.
19. Es la presencia de un síndrome de
abstinencia característico que se
presenta en pocas horas y varios
días después de la interrupción o
reducción del consumo
prolongado de dosis altas de
anfetaminas.
20. • Puede durar desde pocas horas hasta 9 días
• Cambios bruscos de humor
• Depresión
• Ansiedad….
FASE
INICIAL
• Dura de 1 a 10 semana
• Fatiga
• Falta de energía y motivación
• depresión
FASE
INTERMEDIA
• Episodios de intensa necesidad
• Riesgos de recaer
• Ideas suicidas
FASE
INDEFINIDA
21. Fatiga
Sueños vividos y desagradables
Insomnio o Hipersomnia
Apetito incrementado
Retraso o agitación psicomotores
También puede haber
anhedonia y
necesidad irresistible
de tomar la droga
CRAVING .
22. A. Interrupción (o disminución) del consumo de anfetaminas (o sustancias
afines) después de su consumo prolongado y en grandes cantidades.
B. Estado de ánimo disfórico y dos (o más) de los siguientes cambios
fisiológicos, que aparecen horas o días después del Criterio A:
(1) fatiga
(2) sueños vívidos, desagradables
(3) insomnio o hipersomnia
(4) aumento del apetito
(5) retraso o agitación psicomotores
C. Los síntomas del Criterio B causan un malestar clínicamente significativo
o un deterioro de la actividad social laboral, o de otras áreas importantes
de la actividad del individuo.
D. Los síntomas no son debidos a enfermedad médica ni se explican mejor
por la presencia de otro trastorno mental.
23.
24. • Los siguientes trastornos inducidos por anfetamina se
describen en las secciones del manual que tratan sobre
los trastornos con los que comparten características
fenomenológicas.
• Delirium por intoxicación por anfetamina.
• Trastorno psicótico inducido por anfetamina.
• Trastorno del estado de ánimo inducido por
anfetamina.
• Trastorno de ansiedad inducido por anfetamina.
• Trastorno sexual inducido por anfetamina.
• Trastorno del sueño inducido por anfetamina.
25. • La intoxicación aguda por anfetamina se asocia a veces a
confusión, divagación, dolores de cabeza, ideas de referencia
transitorias y tinnitus. Durante la intoxicación por anfetamina a
dosis altas se puede experimentar ideación
paranoide, alucinaciones auditivas con nivel de conciencia
normal y alucinaciones táctiles. En la mayoría de los casos la
persona que consume la sustancia reconoce que los síntomas
son debidos a los estimulantes. Puede aparecer ira
intensa, con amenazas y accesos de comportamiento
agresivo. Son habituales, especialmente durante la
abstinencia, los cambios del estado de ánimo, como
depresión con ideación
suicida, irritabilidad, anhedonía, labilidad emocional y
alteraciones de la atención y la concentración. En los sujetos
con larga historia de dependencia de anfetamina se observan
habitualmente pérdida de peso, anemia y otros signos de
desnutrición y deterioro de la higiene personal.
26. • Los trastornos relacionados con la
anfetamina, así como otros
trastornos relacionados con
estimulantes, en ocasiones van
asociados a la dependencia o el
abuso de otras
sustancias, especialmente las que
tienen propiedades sedantes (como
el alcohol o las
benzodiacepinas), que son
normalmente tomadas para mitigar
los efectos displacenteros
(«tembleque») de las drogas
estimulantes. El consumo
27. • Las pruebas de laboratorio y la exploración física, así como los
trastornos mentales y las enfermedades médicas asociadas a los
trastornos relacionados con las anfetaminas, en general son
similares a los que aparecen en los trastornos relacionados con la
cocaína. Las pruebas de orina para las sustancias de esta clase
suelen ser positivas únicamente 1-3 días, incluso después de un
atracón («binge»). Los efectos pulmonares adversos son
observados menos frecuentemente que con la cocaína, ya que las
sustancias de esta clase rara vez se inhalan. Han sido atribuidas
menos complicaciones maternales o neonatales a esta clase de
sustancias que a la cocaína. Esta diferencia puede reflejar la mayor
prevalencia del consumo de cocaína más que una menor toxicidad
de las anfetaminas. Las crisis convulsivas, las infecciones por el
virus de la inmunodeficiencia humana (VIH), la desnutrición, las
heridas de cuchillo o bala, las hemorragias nasales y los problemas
cardiovasculares son quejas frecuentes de los sujetos con
trastornos relacionados con la anfetamina. Una historia de trastorno
disocial durante la infancia, de trastorno antisocial de la
personalidad y de trastorno por déficit de atención con
hiperactividad puede ir asociada a la posterior aparición de un
28. • La dependencia y el abuso de
anfetamina se observan en
todos los estratos sociales y
son más frecuentes en sujetos
con edades comprendidas entre
los 18 y los 30 años. Su
consumo intravenoso es más
común entre las personas de
grupos socioeconómicos más
bajos, presentando una
proporción varón a mujer de 3 o
4:1. La proporción varones a
mujeres es más desequilibrada
en los que no consumen la
anfetamina por vía intravenosa.
29. • Una encuesta comunitaria llevada a cabo en
Estados Unidos en 1991 dio a conocer que un
7 % de la población había consumido
anfetaminas o sustancias de acción similar
sin prescripción médica al menos una vez en
su vida; un 1,3 % las había consumido el
último año y un 0,3 %, durante el último mes.
Puesto que la encuesta analizaba los
patrones de consumo más que los
diagnósticos, no se sabe cuántos de los
encuestados que tomaban anfetaminas
tenían síntomas que cumplieran los criterios
diagnósticos para la dependencia o el abuso.
Un estudio en la comunidad realizado en
Estados Unidos entre 1980 y 1985, que
usaba los criterios más restrictivos del DSM-
III, informó que aproximadamente un 2 % de
la población adulta había dependido o
abusado de las anfetaminas en algún
30. • Algunos sujetos que abusan o se convierten en dependientes de la
anfetamina o sustancias de acción similar empiezan su consumo
con la intención de controlar su peso. Otros toman contacto con la
sustancia a través del mercado ilegal. La dependencia puede
aparecer rápidamente cuando la sustancia se utiliza por vía
intravenosa o se fuma. La administración oral habitualmente
conlleva una transición más lenta del consumo a la dependencia. La
dependencia de anfetamina se asocia a dos patrones de
administración: consumo episódico o consumo diario (o casi diario).
En el patrón de consumo episódico, el consumo de la sustancia está
separado por varios días de no utilización (p. ej., consumo intenso
durante un fin de semana o en uno o más días de la semana). Estos
períodos de consumo intensivo de dosis altas (llamados «speed
runs» o «atracones») se asocian con frecuencia al consumo de la
vía intravenosa. Estos «atracones» normalmente terminan sólo
cuando se agota el suministro de droga. El consumo crónico y diario
puede implicar dosis altas o bajas y tener lugar durante todo el día o
31. • Cuando el consumo es crónico y
diario, generalmente no hay amplias
fluctuaciones de la dosis de un día para
otro, pero sí que puede haber un
incremento gradual de la dosis con el
transcurso del tiempo. El consumo crónico
de dosis altas llega a ser con frecuencia
displacentero a causa de la sensibilización
y la aparición de disforia y otros efectos
negativos de la droga. Los pocos datos
disponibles sobre el consumo a largo plazo
indican que en los sujetos con
dependencia de anfetamina existe una
tendencia a disminuir o interrumpir el
consumo al cabo de 8-10 años. Esto es
consecuencia de la aparición de efectos
adversos mentales y físicos, asociados a la
dependencia prolongada. Apenas se
dispone de información sobre el curso del
32. • Los trastornos inducidos por anfetamina se caracterizan por
síntomas (p. ej., ideas delirantes) similares a los de los trastornos
mentales primarios (p. ej., trastorno esquizofreniforme versus
trastorno psicótico inducido por anfetamina, con ideas delirantes, de
inicio durante la intoxicación).
• La intoxicación por cocaína, la intoxicación por alucinógenos y
la intoxicación por fenciclidina pueden dar lugar a un cuadro
clínico similar y en ocasiones sólo se distinguen de la intoxicación
por anfetamina por la presencia de sus metabolitos en la orina o en
el plasma. La dependencia y el abuso de anfetamina deben
distinguirse de la dependencia y el abuso de cocaína, fenciclidina
y alucinógenos. La intoxicación por anfetamina y la abstinencia de
anfetamina se distinguen de los otros trastornos inducidos por
anfetamina (p. ej., trastorno de ansiedad inducido por
anfetamina, de inicio durante la intoxicación) en que los síntomas de
estos últimos exceden de los habitualmente asociados a la
intoxicación o a la abstinencia de anfetamina y son de la suficiente
33. • La categoría de trastorno relacionado con
la anfetamina no especificado se reserva
para los trastornos asociados al consumo
de anfetaminas (o sustancias afines) que
no son clasificables como dependencia de
anfetamina, abuso de
anfetamina, intoxicación por
anfetamina, abstinencia de
anfetamina, delirium por intoxicación de
anfetamina, trastorno psicótico inducido
por anfetamina, trastorno del estado de
ánimo inducido por anfetamina, trastorno
de ansiedad inducido por
anfetamina, disfunción sexual inducida por
anfetamina o trastorno del sueño inducido