Cumpliendo el Primer mandamiento:
Mar 12:30 Y amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, con toda tu alma, con toda tu mente y con todas tus fuerzas". Este es el principal mandamiento.
Porque todo lo bueno y en justicia a criterio humano, para Dios no cuenta
Isa 64:6 pues todos nosotros somos como cosa impura,
todas nuestras justicias como trapo de inmundicia…
Es por esto que nuestra obediencia, nuestro amor y nuestra fidelidad es a Dios y no a hombre alguno.
La Biblia nos enseña a distinguir cuando las cosas provienen de Dios y cuando la fuente es distinta:
De Dios: persiste en gozo
No de Dios: añade tristeza.
Jacob, temeroso de la reacción de los pueblos vecinos por la masacre que sus hijos Simeón y Leví hicieron con el pueblo Heveo en venganza por la deshonra de su hermana Dina, recurre al Dios de sus padres, quien le pide que se prepare para un encuentro con El.
Para estar en la presencia del Dios Altísimo es indispensable estar despojado de toda inmundicia, debemos eliminar de nuestra vida todo lo que ocupa el lugar de Dios en nuestro corazón, estar limpios espiritualmente, cumpliendo la voluntad de Dios que es representado con las vestiduras.
Ap 19:8 Y a ella se le ha concedido que se vista de lino fino, limpio y resplandeciente (pues el lino fino significa las acciones justas de los santos)".
El horadar la oreja y colocarse sarcillos significa que la persona hace un compromiso de sometimiento a algo o a alguien, razón por la cual se despojan de los sarcillos, para someterse solo a Dios.
El comprometerse completamente a Dios da como resultado ponerse bajo su protección, y nadie lo tocará, la presencia de Dios se evidenciará, y estará listo para conjuntamente recibir la bendición.
El poner un nombre significa tomar autoridad sobre la persona, así Dios da un nombre a Jacob y es Israel, y determina el buen porvenir que le asigna.
La bendición de Abraham pasada a Isaac pasa a Israel y luego pasará a sus hijos bajo el patronímico derivado de Judá, como judíos, simiente de la cual nace David y de David el Señor Jesucristo.
Ubicación de Bet el
Así como Jacob tuvo 12 hijos, Esaú también tuvo 12 hijos.
Destacamos a Amalec que se cruzan con el pueblo de Israel en múltiples ocasiones. Ex 17:8 Después vino Amalec y peleó contra Israel en Refidim.
Lo importante que es destruir todo lo que en nuestro corazón ocupe un lugar que no sea de Dios, entonces recibiremos la bendición
Mucho cuidado cuando no conozcas quien quiere imponerte manos, bendecirte, podrías estar recibiendo maldiciones, por cuanto la persona no anda en los caminos del Señor.
Si nos ocupamos de que nuestras actividades se encuentren en la voluntad de Dios, nuestras acciones en la vida cotidiana recibirán bendición.
Demos gracias a Dios por cuanto hemos recibido la BENDICIÓN de las bendiciones, y la hemos confirmado voluntariamente con el bautismo.
LA SALVACIÓN