Este documento discute los riesgos de privacidad y seguridad asociados con el uso de redes sociales como Facebook. Explica que Facebook vende la información personal de los usuarios sin su consentimiento y les da a otros empresas el derecho a usar y distribuir el contenido publicado por los usuarios. También advierte a los usuarios que son parte de un gran experimento de vigilancia y que deben tomar precauciones como no aceptar solicitudes de amigos desconocidos o publicar información personal.

1. CONSECUENCIAS DEL MAL
USO
DE LAS
REDES SOCIALES

2. • LASTIMOSAMENTE LAS COSAS
BUENAS QUE UNOS HACEN, OTROS
LAS APROVECHAN PARA HACER EL
MAL…

3. LA VERDAD SOBRE
„FACEBOOK‟
• Facebook está vendiendo la información de sus usuarios al
mejor postor. Cito textualmente: „Lo que muchos usuarios no
saben es que de acuerdo a las condiciones del contrato que
virtualmente asumen al hacer clic en el cuadro „acepto‟, los
usuarios le otorgan a Facebook la propiedad exclusiva y
perpetua de toda la información e imágenes que publican.‟
• De hecho, resalta el experto, los afiliados „automáticamente
autorizan a Facebook el uso perpetuo y transferible, junto con
los derechos de distribución o despliegue público de todo lo
que cuelgan en su página Web.‟ Los términos de uso le
reserva a Facebook el derecho a conceder y sub-licenciar
todo „el contenido del usuario‟ a otros negocios.
• Sin su consentimiento, a muchos usuarios les convirtieron
sus fotografías en publicidad, transformando un comercio
privado en endosos públicos.

4. • Sepan los usuarios de Facebook que son
partícipes indefensos de un escenario, al que los
académicos califican como el caso de espionaje
más grande en la historia de la humanidad. De
paso se convierten de manera inconsciente en los
precursores del fenómeno de „Big Brother te está
observando‟. Alusión directa a la intromisión
abusiva del estado en los asuntos privados del
ciudadano común para controlar su
comportamiento social, tema también de una
novela profundamente premonitoria, escrita en
1932 por el británico Aldous Huxley: „Un Mundo
Feliz.‟

5. Desembolso millonario.
• El pasado mes de octubre, Sanford Wallace, conocido
como el “rey del spam” fue condenado por un tribunal
californiano, en Estados Unidos, a pagar $711
millones a Facebook en un caso de utilización ilegal
con ánimo de lucro de las cuentas de usuarios de esa
red social.
• En su veredicto, el tribunal respondió a la denuncia
de Facebook, que acusaba a este “pirata informático”
de enviar mensajes masivos indeseados a los
usuarios con el fin de obtener sus datos de acceso a
la cuenta o redirigirlos a páginas web que pagaban a
Wallace por cada visita.

6. Algunas recomendaciones
• no aceptar amistad de personas que no conocen. Aquí se aplica el
viejo dicho de que no hablen con extraños. Si alguien les pide su
amistad, verificar antes el perfil de esa persona; ver que amigos
tienen en común, ver sus estudios, intereses, etc.
• Si notan algo sospechoso, rechazar dicha solicitud. Es
recomendable también no publicar información personal dentro de
su perfil, tales como: dirección postal, teléfono(s), correo
electrónico, lugares en dónde estás, a dónde irás, productos que
adquieres, fotos o videos comprometedores.
• Tampoco publicar el nombre de tus hermanos, padres y familiares,
ya que está información puede ser usada por los delincuentes para
amenazarte por otros medios como el teléfono.

7. • Aunque las redes sociales son un escape para
algunas personas para expresar sus sentimientos
o problemas familiares, no deben de darlos a
conocer de manera pública por estos medios, ya
que serían un blanco fácil de los delincuentes.
• Recuerda que todo lo que publiques lo conocerá
todo el mundo. Aunque es cierto que las redes
sociales pueden configurarse para restringir que
personas tengan acceso a tu información, la
verdad es que no existe un 100% de privacidad; si
no ya no serían redes sociales.

8. Son un gran apoyo
• La tecnología y los nuevos medios de
comunicación, bien aprovechados pueden
apoyar en gran medida el proceso
educativo (enseñanza-aprendizaje) de
nuestros hijos, pero mal aprovechada,
puede ser un distractor e inhibidor del
conocimiento, sin dejar a un lado de los
peligros que enfrentan los jóvenes/niños al
estar conectados a Internet y en especial
de las redes sociales.

9. • Es un deber de los padres de familia,
tutores y maestros fomentar en los niños y
jóvenes, valores, el hábito de la lectura, la
cultura y el deporte como complemento al
uso de la tecnología para un crecimiento
saludable.