2. ¿Recuerda algún lugar en su vida
donde tuvo que tomar alguna
decisión?
Si alguna de esas decisiones las tomó
en algún monte, seguramente se va a
identificar mucho con el mensaje de
hoy. Porque cada monte en las
escrituras representa una experiencia
espiritual.
3.
4. Son verdaderos recuerdos
de aquellas circunstancias
por las que a menudo
estamos pasando. De esta
manera podemos ver
algunos de esos
significados.
5. Por ejemplo, el monte “Moriah” de
Génesis 22, tiene que ver con la fe y
la obediencia puesta a prueba de
parte de Abraham. El monte
“Horeb” de Éxodo 3, es el lugar
desde donde el Señor llama a una
misión libertadora.
6. Gen 22:2 Dios le dijo:
–Toma a Isaac, tu único[b] hijo,
al que tanto amas, y vete a la
tierra de Moria.[c] Una vez allá,
ofrécelo en holocausto sobre el
cerro que yo te señalaré.
7. Exo 3:1
Llamamiento de Dios a
Moisés
Moisés cuidaba las ovejas de su
suegro Jetró, que era sacerdote
de Madián. Un día, llevándolas a
través del desierto, llegó hasta el
monte de Dios, que se llama
Horeb.[a]
8.
9. Jos 12:1
Las conquistas de Moisés[a]
Estos son los reyes que los israelitas
derrotaron al este del río Jordán, y
los territorios que conquistaron
desde el río Arnón hasta el monte
Hermón, con toda la región oriental
del valle del Jordán:
10.
11. El monte “Hermón” de
Josué 12 es una
representación de la
conquista a la tierra
prometida.
12.
13. El monte “de los Olivos” de Lucas
22, es una representación del
quebrantamiento de la voluntad
humana a la voluntad de Dios. El
monte “Gólgota” de Lucas 22, nos
plantea la ofrenda del sacrificio para
la salvación. Y para el tema de hoy
tenemos el monte “Carmelo” de 1
Reyes 18.
14.
15. Ese monte es la más grande
representación del “fuego del
cielo”, donde se compróbo quién es
el auténtico y verdadero Dios. La
historia Bíblica nos recordará que
fue en la cumbre de esa montaña
donde el pueblo de Israel fue
confrontado con el pecado de la
idolatría.
16. Allí Elías, después de haber pasado
por varias pruebas, desafió al
malvado rey Acab para que
congregara a todo Israel de manera
que, a través del fuego quedara
establecida la autenticidad del
verdadero Dios.
17. La pregunta: “¿Hasta cuándo claudicaréis
vosotros entre dos pensamientos?” v. 21,
será la que determinará la razón del tema de
hoy: EL MONTE DE LA DECISIÓN.
Acompañemos a Elías en su valentía. Vea
usted cómo un solo hombre se enfrentó a
cuatrocientos con las armas de la palabra y
el poder de Dios, y los venció. Veamos,
pues, cómo el fuego que desciende de los
cielos consume el verdadero holocausto
comprobando quien es Dios.
18. I. EN EL MONTE DE LA DECISIÓN
HAY UN DESAFÍO QUE ENCARAR
19. 1. El desafío de reunir a los idólatras v. 20.
Nos llama la atención que Acab no haya
intentado matar al profeta, después de haberlo
buscado por todas partes (18:10). Bueno es
obvio que quien ande haciendo la voluntad de
Dios, solamente él se encargará de aniquilarlo o
llevárselo, como será el caso de Elías. Así que
Acab, en lugar de atentar contra el profeta,
aceptó el desafío de convocar a todo Israel y los
profetas que dirigen el culto que ha provocado
la ira de Dios.
20. Ahora bien, ¿por qué la
convocación al monte de
Carmelo? Bueno el monte de
Carmelo se encontraba entre
Israel y Fenicia, y ese lugar era
como la habitación sagrada de
Baal.
21. Seguramente Acab pensó que la
contienda en ese lugar les daría
una gran ventaja a los profetas de
Baal. Sin embargo para Elías
aquello era la oportunidad para
demostrar en su propio terreno
quién es el verdadero Dios.
22. Note la convocatoria: “Todos los hijos
de Israel”, y los profetas, en este acaso
los de Baal. Por alguna razón los
profetas de Asera no asistieron,
salvándose de una muerte segura. Así
que todos los idólatras con sus
dirigentes fueron convocados. La
idolatría, cualquiera sea su origen, debe
ser confrontada. Ningún pecado
aborrece más el Señor que este.
23. 2. El desafío de definir sus convicciones v.
21
El planteamiento de la pregunta de Elías
es que no se puede vivir bajo dos
pensamientos. La palabra “claudicar”
significa: “vacilar, oscilar, fluctuar”, etc.
Una traducción comentada de este texto
en la RVA, lo traduce así: “¿Por cuánto
tiempo danzaréis cojeando sobre dos
muletas?”.
24. Lo que esta pregunta plantea es que
es Israel, y el pueblo que se dice
adorar a Dios, es llamado a ejercer
lo que técnicamente se conoce
como la monolatría; lo que significa:
fidelidad y adoración a un sólo Dios
de ente muchos.
25. El profeta le está diciendo es que no es
bueno que tengan un pie en Israel y el
otro en Fenicia, adorando a dos dioses.
Que si uno era el verdadero Dios y el
otro falso, entonces que siguieran al
verdadero y que se olvidaran del dios
impostor que además era impotente.
Es muy peligroso claudicar entre el
servicio de Dios y el servicio al pecado,
el dominio de Cristo y el dominio de
nuestras concupiscencias.
26. El asunto es que si Jesús es el único
Salvador, aferrémonos solo a Él para
todo; si la Biblia es la palabra de
Dios, obedezcámosla, recibámosla y
sometamos nuestro entendimiento
a su guía divina. No podemos servir
a Baal y a Dios al mismo tiempo.
28. La propuesta de Elías de partir un buey en pedazos
para ponerlo como sacrificio, y que el dios verdadero
lo consumiera por el fuego, tiene sentido. Se pensaba
que Baal, además de ser el dios de la fertilidad, era el
dios de fuego, sobre todo cuando se manifestaba en
los rayos y centellas. Así que Elías les llevó a una
perfecta trampa donde cayeron, desde el rey y los
falsos profetas. Como la gran sequía de tres años y
medio y la hambruna habían sido una vergüenza para
los adoradores de Baal, fue muy obvio que el Dios que
está en control ahora es el Dios de Elías.
29. El profeta, pues, les concede a ellos la oportunidad de
demostrar que Baal sí era verdadero, trayendo fuego
del cielo. Lo que aquí se pone de manifiesto es que el
Dios que tenga poder, demostrándolo al consumir el
fuego, será el mismo que tenga poder para perdonar
el pecado, ya que al consumir la ofrenda representada
en los bueyes partidos en pedazos, quedará como el
representante para aliviar la calamidad. En el monte
de la decisión hay un desafío que encarar. La vida
cristiana no puede vivirse en dos direcciones. Es
necesario que el fuego real de Dios consuma lo falso
y surja lo verdadero.
30. II. EN EL MONTE DE LA DECISIÓN
HAY QUE OÍR AL DIOS
VERDADERO
1. Un incendio sin fuego previo v.
23.
31. Elías de una forma muy inteligente llevó a toda
esta gente idólatra a su propio terreno. Ellos
aceptaron ofrecer dos toros y clamar cada uno
a su dios. Pero ellos también aceptaron no
poner fuego debajo del altar, pues la idea era
que el dios verdadero respondería de esta
forma. Era encender el altar sin fuego previo.
Como Baal era el dios de la vida a través quien
“venía” la lluvia y el sol, entonces, si él tenía el
poder para hacer estas cosas, la mejor
respuesta sería ver el fuego consumiendo al
holocausto.
32. Y si no había hecho venir la lluvia durante
esos tres años y medio, a lo mejor sí podía
traer el fuego de arriba. Los adoradores de
Baal creían que en cada tormenta había una
gran cabeza de su dios derramando la lluvia,
pero además pensaban que la cabeza de su
dios se podía ver también en el mismo sol.
De este modo, cuando el sol brillaba y
estaba ardiendo, ellos sentían que estaban
mirando a Baal. Sin embargo, Baal tampoco
pudo traer el fuego.
33. Pero la Biblia si nos habla de nuestro
Dios trayendo fuego del cielo, lo cual
comprueba que es el único que
puede consumir un altar sin el fuego
previo. Dios se manifiesta a nuestras
vidas a través del fuego del Espíritu.
Oremos para que él responda.
34. 2. El nombre que no debe ser invocado v. 26.
Hay algo interesante en esta historia. Si algo
hicieron estos hombres fue orar, clamar,
suplicar… y lo hicieron por varias horas. ¿No es
una paradoja que mientras los adoradores de
los ídolos gastan grandes tiempos adorando lo
que no responde ni tiene vida, nosotros que
tenemos al Dios verdadero no lo invocamos con
la frecuencia y la reverencia que él nos merece?
35. como era de esperarse, nadie
respondió, un silencio conmovedor
estuvo allí en la montaña por un
largo rato.
Note todo lo que hicieron para
llamar la atención de su dios Baal,
pero sin resultado ninguno (v. 27,
28).
36. Hoy tenemos los modernos adoradores de Baal
que pierden el control en el “culto” a Dios y sus
cuerpos caen en un estado de inconsciencia,
arguyendo los que practican tales cultos que
eso es una “manifestación” del Espíritu. ¡Cuán
lejos está esto del culto racional que ordena la
Biblia! No son los gritos ni los movimientos los
que determinan un culto vivo. Pero si hay un
Dios que responde. La Biblia nos recuerda que
“todo aquel que invocare el nombre del Señor,
será salvo”.
37. 3. Un dios con mucho trabajo para
responder v. 27.
La burla de Elías revela una parte
interesante de su carácter. Al
principio nos parece ver al profeta
como muy serio, sin posibilidad de
“echar un chiste” o reírse de alguna
situación cotidiana.
38. Pero mírelo en esta escena.
Obsérvelo a lo mejor debajo de
algún árbol con los brazos cruzados,
entre burlas y risas, exasperar a los
falos profetas con sus ocurrencias.
“Quizás está meditando” fue una de
sus bromas por lo que les decía que
gritaran más duro.
39. Algunos creen que aquí hay un eufemismo con
lo que se quería decir que a lo mejor estaba en
el baño haciendo alguna necesidad. “Tiene
algún trabajo” era otra burla pesada. Algunos
creen que la frase también significa que su dios
se había ido de “cacería”. “Tal vez duerme” fue
una de sus últimas ocurrencias del profeta. Todo
esto para decirnos que así como en ese tiempo,
hay mucha gente ahora que ha puesto su fe y
confianza en dioses muertos que no le dan
respuestas.
40. Hombres que desperdician sus
vidas enteras por las cosas que
pronto perecen. Son aquellos que
pasan toda una vida a espaldas del
Dios de los cielos, siguiendo sus
propios “baales” que al final no
satisfacen su alma. Pero el Dios de
Elías si te responderá.
41. III. EN EL MONTE DE LA DECISIÓN HAY
UN CRISIS QUE FINALIZAR
1. Hay que arreglar el altar arruinado v.
30.
42. Los profetas de Baal pasaron casi
todo el día clamando a su dios y no
hubo respuesta. Ahora casi todos
están exhaustos. Muchos de ellos
desangrados por la flagelación. Otros
habrían quedado roncos de tanto
gritar. La escena simplemente es
dramática.
43. Seguramente hubo un dejo de
frustración colectiva. Todos se han
dado cuenta que Baal no pudo
responder a pesar de todo lo que
hizo para eso. Ahora le toca el turno
al profeta de verdadero. Ahora es
tiempo de poner fin a la crisis. Ahora
es el momento de saber quién el
dios verdadero.
44. Así que lo primero que Elías hace es
arreglar el altar arruinado. ¿No es esto
significativo? ¿Por qué se había
abandonado el altar al Señor? ¿Quiénes
lo habían abandonado? Antes que Dios
responda es necesario que arreglemos
el altar donde se invocará su nombre.
Un altar arruinado es símbolo de
desidia e irresponsabilidad.
45. Es no darle la importancia que
tiene mi devoción al Señor. Elías
arregló el altar con doce piedras
pensando en las doce tribus de
Israel que fueron siempre testigos
de la única adoración a Dios. Israel,
como la iglesia de Cristo, sabe que
hay que arreglar el altar para
invocar al verdadero y único Dios.
46. 2. “Sea hoy manifiesto que tú eres Dios
en Israel…” v. 36.
Los hombres que han conocido el
poder de Dios como Elías, saben que él
no les dejará en vergüenza en los
momentos más cruciales de su vida.
Saben que él es el único que le pone
fin a la crisis por la que se pueda pasar
en un momento determinado.
47. Note que el profeta se burló del culto
que los falsos profetas le dieron a Baal
porque él sabía que Jehová, el Dios que
obró en el pasado todos los portentos
de los cuales ellos eran conocedores, se
hará manifiesto delante de una nación
que ahora está recibiendo el juicio por
haberse entregado a la idolatría.
48. El trabajo previo a esto simplemente
fue extraordinario. Elías quería que no
quedara dudas acerca de la
manifestación poderosa de Dios. Como
el reto era que “el Dios que respondiere
por medio de fuego, ése sea Dios” v. 24,
se aseguró de abrir una zanja en el altar.
Eso nunca se había hecho. Puso el buey
en pedazos para el sacrificio sobre la
leña.
49. Luego ordenó llenar hasta doce veces
el altar con agua, tanto así “que el
agua corría alrededor del altar, y
también se había llenado de agua la
zanja” v. 35. Solo el fuego divino puede
encender el altar mojado. De esta
manera se pone fin a la credibilidad
divina.
50. 3. “Entonces cayó fuego de Jehová… ” v. 37.
Lo primero que vemos en esta respuesta del
cielo es lo corto de la oración. Así que mientras
450 profetas duraron casi un día gritando y
maltratándose para ver si Baal respondía, Elías
con una sola oración, en un solo momento, trajo
fuego del cielo. Dios respondió. ¡Y de qué
manera lo hizo! “…y consumió el holocausto, la
leña, las piedras y el polvo, y aun lamió el agua
que estaba en la zanja”.
51. La respuesta a través del fuego
comprobó que nuestro Dios si es el
“Dios del fuego” y no Baal como era la
creencia. Y con la diferencia también
que él es el Dios de la lluvia, del sol y
de todo lo que existe. El fuego que
viene de Dios consume todo. Ante la
vista del pueblo y los profetas idólatras
ahora hay una evidencia clara: Baal no
es el dios verdadero.
52. La confesión: “¡Jehová es el Dios, Jehová es
el Dios!, trajo al pueblo a recordar quién era
Israel y a quien pertenecía. Muchos años
atrás ellos fueron instruidos con estas
palabras: “Oye, Israel: Jehová nuestro Dios,
Jehová uno es” (Dt. 6:4). Por lo tanto, no hay
otro dios a quien seguir ni adorar. Como
“Jehová es el Dios”, entonces ya no hay por
qué claudicar entre dos pensamientos (v.
21). Decidamos solo por él.
53. Ninguna cosa divide más la mente
de un creyente que estar sirviendo
a “Baal” y a Dios al mismo tiempo.
Y aunque es cierto que hoy
estamos lejos de adorar tales
imágenes, hay que reconocer que
en esa división mental se pudiera
estar adorando lo que no es Dios
54. Hoy el desafío de Elías sigue latente: Si
Jehová es Dios, entonces hay que
seguirle y obedecerle. Si Jehová es
Dios entonces hay que acabar con
todos los “baales” que pudieran estar
robando la adoración que le debo solo
a Dios. Si Jehová es Dios, entonces
amelo de todo corazón, conságrele a él
su vida, dones, talentos, bienes
materiales.
55. Si Jehová es Dios, y usted no lo tiene
como su Dios, acéptelo hoy. Si Jehová
es Dios y no se ha bautizado, entonces
tome la decisión esta hora de seguirle
en obediencia. Si Jehová es Dios
renuncia a cualquier “Baal” que le ha
hecho crear un culto falso en su
corazón. No podemos servir a dos
señores, dijo el Señor.