La evaluación formativa y sumativa se utilizan para medir el progreso de los estudiantes. La evaluación formativa se usa durante el curso para identificar las fortalezas y debilidades de los estudiantes y mejorar el aprendizaje, mientras que la evaluación sumativa se usa al final del curso para calificar el rendimiento general de los estudiantes. Ambos enfoques incluyen una variedad de estrategias como pruebas, proyectos y observaciones.