El mono caprichoso le pidió al barbero que le cortara el rabo, luego quiso recuperarlo pero el barbero dijo que se lo llevó el basurero. El mono entonces pidió una cuchilla de afeitar, luego se la dio a un pescador a cambio de su cuchilla, pero luego quiso recuperarla porque se rompió de tanto cortar pescado, así que el pescador le dio el pescado más gordo. Así el mono fue intercambiando sus objetos con diferentes personas a lo largo del día.
La historia olvidada de la primera protesta ecologista
1. El mono caprichoso
Había una vez un mono muy requetemono que entró
en una barbería y le dijo al barbero:
– Señor barbero, corteme usted el rabo, que no lo
quiero.
El barbero se extraño, pero el rabo le cortó.
A los pocos días, el monito volvió a la barbería:
– Devuélveme usted mi rabo, señor barbero.
– No puedo. Que se lo llevó el basurero.
– ¿Ah, sí? Pues me tiene usted que dar una cuchilla de
afeitar- contestó el monito, muy disgustado
El barbero, por no oírlo, le dio la cuchilla. Allá que va el
monito, la mar de contento, y anda que te anda pasó por la
calle del pescado. Vio a un hombre que estaba limpiando el
pescado para venderlo.
– Señor pescador- dijo el mono-, ¿no le da a usted asco?
– Si quiere, le doy mi cuchilla.
– Bueno.
Y, sin pensárselo dos veces, el mono se acordó de ella
y volvió a la calle del pescado. Y dijo con mucha pena:
– Señor pescador, devuélvame usted mi cuchilla, que
era muy buena.
El pesador le contesto:
– No puedo, que de tanto cortar pescado, se me rompió.
– ¿Ah, sí? Pues me tiene usted que dar el pescado más
gordo.
El hombre, por no oírlo, se lo dio.
El mono se puso a andar y pasó por la calle del pan.
Y así, poco a poco se fue recorriendo la panadería, la
lavandería y la escuela.
2. Corta Atalaya es la explotación a cielo
abierto más grande y perfecta de Europa. Las
asombrosas dimensiones de su elipse son: 1200
metros de largo, 900 metros de ancho y 350
metros de profundidad. Fue uno de los
proyectos más ambiciosos de la Rio Tinto
Company y estuvo en explotación hasta hace
aproximadamente 20 años. Su situación
geográfica corresponde a 37°42 12 N, 6°36 10 O′ ″ ′ ″ .
Historia
Esta explotación a cielo abierto, perteneciente a la región
occidental de la Masa San Dionisio, se inició en 1.907 tras los
grandes hundimientos producidos en las partes altas de este
sector dos años antes, los cuales ocasionaron la combustión de las
piritas situadas en un sector de la zona destruida.
En su explotación se empleaban los clásicos bancos y los pocillos
Gloria o "Glory Holes" hasta el nivel del piso 16. Junto a esta corta
existía un pueblo llamado La Atalaya, fundado en el año 1.883,
contaba con 257 edificios y 823 habitantes. En 1970 se aprobó la
ampliación de la explotación de Corta Atalaya, lo que provocó un
año más tarde la destrucción de éste pueblo.
La Atalaya
Esta aldea se construyó para la explotación subterránea de Filón
de San Dionisio, que en 1907 pasaría a ser el yacimiento a cielo
abierto Corta Atalaya.
En 1873, Rio Tinto Company adquirió las minas de Riotinto y planteó
como problema el traslado de los trabajadores desde sus hogares
hasta el puesto de trabajo y, teniendo en cuenta únicamente
premisas económicas, planificó la construcción de viviendas donde
ya los mineros habían construido chozas para pernoctar cerca del
lugar de trabajo. De esta forma la compañía se limitó a sustituir las
chozas o cabañas por edificaciones más duraderas, construyendo
3. barriadas en el lugar elegido por los mineros. Se comenzó con la
construcción de 100 viviendas, de 45 metros cuadrados, reduciendo
las necesidades de alojamiento hasta reducirlas a su mínima
expresión.
La compañía dotó a este núcleo de plaza pública, capilla, almacén
de comestibles, casino, escuela, cuartel de la Guardia Civil. Esta
barriada albergó a parte de la población de trabajadoras de
Riotinto durante casi un siglo.
En 1.910 se produjo el mayor índice de crecimiento de La Atalaya
según los registros del censo:
Año Población
1888 823
1900 1272
1910 1472
1920 1105
1930 1238
1940 1009
1950 662
En 1970 se aprobó un ambicioso proyecto para la ampliación de
Corta Atalaya, en el cual se contemplaba la destrucción de esta
aldea. Un año más tarde el proyecto fue llevado a cabo y, tras
alojar a los habitantes en Alto de la Mesa, El Valle o en Nerva, se
demolieron todas sus viviendas.
En la actualidad, aun se pueden observar las fantasmales ruinas del
colegio esta aldea, al oeste de la Corta que durante muchos años
fue la mayor explotación a cielo abierto del mundo.
4. La primera protesta ecologista de la
historia costó más de cien vidas en 1888
Las casas victorianas de Bella Vista siguen en pie, entre caminos de césped reluciente y matas de romero
en flor, pero en el barrio no se ve un alma. El viento sacude las copas de los pinos y agrupa papeles y plásticos en
torno a la alambrada de las pistas de tenis del Club Inglés, que ha mantenido íntegramente las viejas normas
-sólo para hombres- hasta hace cinco años. En el barrio construido por la Río Tinto Company Limited, que
mantuvo un poder colonial en la zona durante 81 años, hasta mediados del siglo XX, todo sigue intacto. La
iglesia presbiteriana, el cementerio melancólico y la columna funeraria -tallada en escoria romana- en homenaje a
los cinco directivos muertos en la Gran Guerra.
En cambio, no hay tumbas, ni epitafios, ni monumentos a la memoria de los
más de cien mineros (y mujeres, y niños, y ancianos) que murieron bajo el fuego
graneado de los soldados del Regimiento de Pavía el sábado 4 de febrero de 1888; ni
siquiera está en pie la plaza del viejo pueblo de La Mina, donde fueron masacrados,
cuando reclamaban mejoras salariales y el fin de los humos tóxicos que envenenaban
el aire. El escenario de aquella protesta, que muchos consideran la primera de tinte
ecologista de la historia, yace bajo toneladas de escoria en la mina de Cerro
Colorado, abandonada en 2001.
Las crónicas de la época, en aquella España turbulenta de la regencia
de María Cristina, apenas se ocuparon del tema. Hubo algún diario
republicano que pidió cuentas, pero una protesta contra la empresa más
poderosa del país, que salvó de la bancarrota a la I República al pagar 92
millones de pesetas, en 1873, por los derechos de explotación de los
yacimientos de cobre, plata y oro de Riotinto, estaba condenada a ser
aplastada y sepultada en el olvido. Las Cortes apenas discutieron el incidente.
Después de todo, era un suceso incómodo, ocurrido en la remota cuenca
minera de Huelva. Se dijo que los muertos no pasaban de 14. "Pero el sentido común te dice que fueron muchos
más, entre 100 y 200 personas. Porque los soldados hicieron tres descargas con sus fusiles a bocajarro, y la plaza
de la Constitución de Minas de Río Tinto estaba llena a rebosar.
Se sabe que fue un anarquista misterioso, Maximiliano Tornet, el elemento catalizador de aquella
protesta. El líder capaz de involucrar en ella a mineros, agricultores y ganaderos, perjudicados igualmente por los
humos tóxicos. Todos sufrían por culpa de las teleras, montañas de mineral que se quemaba al aire libre.
Cuentan que los días de manta, las emanaciones de dióxido de azufre llegaban a la sierra de Sevilla y a Portugal.
En Riotinto, la gente huía del pueblo y de la mina en busca de aire más limpio. La situación se había hecho
intolerable. "La combustión del mineral al aire libre llevaba 24 años prohibida en el Reino Unido", dice Cobos
Wilkins.
5. Prunus dulcis
El Almendro es un árbol caducifolio que puede alcanzar 10 m de
altura. De tallo liso, verde y marrón cuando es joven, pasa a ser
agrietado, escamoso y grisáceo cuando es adulto. Hojas simples,
lanceoladas, largas estrechas y puntiagudas, de 7.5-12.5 cm de longitud
y color verde intenso, con bordes dentados o festoneados. La Flor
solitaria o en grupo de 2- 4, es pentámera con cinco sépalos con colores
variables entre blanco y rosado dependiendo de las especies de unos 3-5
cm de diámetro. Los frutos de unos 3-6 cm de longitud en drupa con
exocarpo y mesocarpo correosos y endocarpo duro, oblongos,
elipsoidales, con carne seca, tomentosos, de color verde, dehiscentes.
Tarda 9 meses en madurar.
Clasificación científica
Reino: Plantae
División: Magnoliophyta
Clase: Magnoliopsida
Orden: Rosales
Familia: Rosaceae
Subfamilia: Prunoideae
Género: Prunus
Subgénero: Amygdalus
Especie: P. Dulcis