2. PON EN ORDEN TU VIDA ¿A dónde vas tan de prisa? Frena y ubícate! Haz una lista. Separa lo importante de lo urgente. Ordena los pendientes por prioridad. Respira profundo y piensa con calma QUÉ quieres de la vida, cuál es tu sueño. Ve por él. Ponte metas pequeñas a corto plazo y cumple con ellas para que poco a poco, alcances metas más grandes.
3. PRACTICA EL AGRADECIMIENTO Lo más importante de todo lo que ocurre en este momento, es que estás vivo! Es un regalo. Algo tienes que hacer, una misión que cumplir. ¿Qué esperas? Agradece los dones que día a día te ofrece la vida. Cuéntalos y haz buen uso de ellos. Muchas veces tenemos más de lo que podemos disfrutar, pero cuesta trabajo reconocerlo.
4. OBSERVA TUS PENSAMIENTOS Lo que piensas de un problema es más importante y determinante que el problema en sí. Muchas veces no es fácil enfrentarlos. Pero haz el esfuerzo de volverte más positivo y mejora tu actitud. Evita ser portador de malas noticias. No te involucres en chismes o comentarios negativos hacia otras personas. Vive y deja vivir!
5. ACEPTA LO QUE NO PUEDES CAMBIAR El pasado no importa pues ya pasó. Olvida malos sentimientos, vive tu duelo, perdona y libérate del peso que cargas por tanto tiempo. Ábrete a comenzar de nuevo. Puedes cambiar tu situación personal. Toma tiempo pero es posible mejorar tu situación en la vida por difícil que sea. Comienza a ver los inconvenientes como oportunidades y procura darle una respuesta creativa a cada situación.
6. ENTREGA EL 100% EN TODO MOMENTO Comprométete a dar y recibir con abundancia. Siempre ofrece a quien te encuentres un pequeño regalo: una sonrisa, un gracias, un saludo, una palabra de aliento. Mantén en circulación la verdadera riqueza de la vida. Muestra interés, aprecio y comprensión por los demás. Y siéntelo. Silenciosamente, envía pensamientos de amor, solidaridad, paz y alegría.
7. ÁBRETE A LA COMUNICACIÓN Crea puentes de comunicación que te permitan expresar y compartir ideas y sentimientos. Deja de esperar que otros se comuniquen contigo. Toma la iniciativa y acércate para compartir y crear soluciones y estrategias para iniciar nuevos proyectos. Recuerda que la comunicación es el puente que acorta distancias que nos tuvieron separados por diferencias o malos entendidos.
8. LIBERA LA RABIA Muchas personas están cargadas de emociones negativas y tensiones que potencian la ira. Cuando te dejas llevar por la ira, terminas (en la mayoría de los casos) afectando y deteriorando tus relaciones con los demás. La ira se convierte en resentimiento cuando la hemos acumulado por mucho tiempo. A quien realmente daña es a la persona que la siente: tu mismo. Aprende a respirar imaginando que con cada respiración, eliminas la ira de ti. Practícalo hasta que te sientas mejor.
9. VUELA, EL AVIÓN ERES TU Cuando llueve fuerte, por un momento creemos que el sol se fue. Si volásemos en avión por encima de las nubes… veríamos un sol brillante… un sol que siempre está. Esperemos a que se disipen las nubes para ver de nuevo el sol.
10. PRACTICA LA ORACIÓN Y LA MEDITACIÓN La oración y la meditación son formas de comunicarnos con nuestro interior… y con la vida en su más pura esencia… ¡con Dios!