2. Para el/la profe de Religión
CICLO MEDIO
ADVIENTO Y NAVIDAD 2012 (DICIEMBRE 2012)
Objetivos:
-Acercarse al lenguaje litúrgico del Adviento.
-Comprender el lenguaje bíblico y simbólico del Adviento.
.Conocer el significado del Adviento para los cristianos.
-Saber cuándo empieza y cuánto dura el Adviento.
-Celebrar la Navidad utilizando diversos recursos.
-Acercarse al lenguaje simbólico de la Navidad.
-Construir una personalidad humana basada en valores de solidaridad, servicio
y generosidad.
-Aprender a trazar planes para intentar ser mejor persona.
-Aprender a formarse desde dentro.
-Valorar más la compañía de los demás y menos las cosas superfluas de la
Navidad.
-Valorar la “suerte” que tenemos de vivir “aquí” y “ahora” e intentar ayudar a
mejorar las Navidades de los que no viven como nosotros.
Orientaciones y metodología:
-Continuar, como se ha hecho siempre, explicando lo que es el Adviento,
creando en la clase ambiente “navideño”, fomentando actitudes de generosidad
(recogida de alimentos), cantando villancicos,…
.Utilizar (o no) el material proporcionado ( hacer las fichas, pintar dibujos,
representar cuentos,…).
-El tiempo para realizar el “trabajo” sería en 4 sesiones ( una cada semana): la
primera sobre Adviento en la primera semana de éste y las otras tres sesiones,
en las semanas posteriores).
-El material puede utilizarse en ficha grande (folio por las 2 caras: cuento/ficha -
dibujo) o en ficha pequeña reduciéndolas (para recortar y pegar en libreta).
Material:
-Apuntes sobre el Adviento (diferentes para 3º y 4º)
-3º: ficha y dibujo corona Adviento.
- 4º: ficha/ estrella de Adviento).
-Historia de la Navidad (apuntes iguales para 3º y 4º).
-Cuentos : 3º: Un trato con Santa Claus.
La pequeña estrella de Navidad.
El felicímetro.
4º: Clara y el belén de Navidad.
La mejor elección.
Regalos de Navidad.
-Ficha cuento (resumen, preguntas y dibujo)
- Video para ampliar material.
3. EL ADVIENTO 3º E.P.
-Significa “espera”.
-Son las 4 semanas antes de Navidad, tiempo en que los
cristianos esperamos la venida de Jesús (como hizo María).
-En ese tiempo, los cristianos nos preparamos intentando ser
mejores personas y hacer felices a los demás.
La corona de Adviento:
Origen: es de tradición europea, cuando se ponían velas durante
el invierno para representar el fuego.
Forma circular: El círculo no tiene ni principio ni fin, como el
amor de Dios.
Ramas verdes: Es el color de la esperanza y la vida.
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6. EL ADVIENTO 4º E.P.
-La palabra Adviento procede del latín ad- venio y significa
llegar, esperar.
-El Adviento es un tiempo litúrgico que empieza cuatro
Domingos antes del 24 de diciembre, que es cuando acaba (por
eso dura cuatro semanas).
-Es cuando empieza el año litúrgico.
-En esas semanas de espera (simbolizando el tiempo queMaría
esperó el nacimiento de Jesús), los cristianos nos preparamos
intentando ser mejores personas y hacer felices a los demás.
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8. Un trato con Santa Claus
Julio estaba muy enfadado por los pocos regalos que había recibido la Navidad anterior, así
la carta que escribió a Papá Noel aquel año resultó muy desagradable y Santa Claus fue a
visitarlo unos días antes.
- ¿Por qué estás enfadado si tuviste muchos regalos? - preguntó Papá Noel- ¡Pero si
también tienes un montón de amigos!
- ¡Me da igual! Quiero más juguetes y menos amigos.
Santa Claus le propuso un trato:
- Está bien. Como muchos otros niños me han pedido tener más amigos, te daré un regalo
más por cada amigo al que renuncies para que se lo pueda ofrecer a otros niños.
- ¡Hecho! - dijo el niño sin dudar... -Además, puedes quedártelos todos.
Aquella Navidad Julio se encontró con una enorme montaña de regalos. Tantos, que dos días
después aún seguía abriéndolos. El niño estaba feliz. Luego comenzó a jugar con sus regalos.
Eran tan alucinantes que no pudo esperar a salir a la calle para mostrárselos a los demás
niños. Pero, una vez en la calle, ninguno de los niños mostró interés por aquellos juguetes. Y
tampoco por el propio Julio. Ni siquiera cuando este les ofreció probar los mejores y más
modernos aparatos.
- Vaya- pensó el niño - supongo que me he quedado sin amigos. Bueno, qué más da, sigo
teniendo mis juguetes.
Y Julio volvió a su casa. Durante algunas semanas disfrutar de un juguete nuevo cada día le
hizo olvidar su falta de amigos. Pero no había pasado ni un mes cuando sus juguetes
comenzaron a resultarle aburridos. Siempre hacían lo mismo. Entonces empezó a echar de
menos a sus amigos. Se daba cuenta de que cuando estaba con sus amigos, siempre se les
ocurrían nuevas ideas y formas de adaptar sus juegos ¡Por eso podían jugar con un mismo
juguete durante semanas! Y tanto lo pensó, que finalmente llegó a estar convencido de que
sus amigos eran mucho mejores que cualquier juguete ¡Pero si llevaba años jugando con sus
amigos y nunca se había aburrido de ellos! Y tras un año de mortal aburrimiento, al llegar la
Navidad redactó para Papá Noel una carta en la que pedía perdón por haber sido tan torpe
de cambiar sus mejores regalos por unos aburridos juguetes, y suplicaba recuperar todos
sus antiguos amigos.
Y desde entonces, no deseó por Navidad otra cosa que tener muchos amigos y poder
compartir con ellos momentos de juegos y alegrías, aunque fuera junto a los viejos juguetes
de siempre…
9. Un trato con Santa Claus
¿Qué opinas de la elección de Julio: juguetes en lugar de
amigos?___________________________________________________________
¿Te ha pasado alguna vez que te has aburrido con los
juguetes?________________________________________________________
juguetes?________________________________________________________
¿Y con los amigos/as?___________________________________________
¿Qué prefieres tú?_______________________________________________
qué?___________________________________________________
__________________________________________________________
¿Por qué?__________________________________________________________
10. Clara y el belén de Navidad
Clara era toda una artista con los belenes de Navidad. Durante todo el año preparaba
bocetos, materiales y personajes para que al llegar la siguiente Navidad su nacimiento
fuera aún mejor que el del año anterior.
Y el año en que cumplía los 10 años, pensando en aquello que cantaban los ángeles del Señor
“Gloria a Dios en las alturas...” preparó el belén más precioso que uno pudiera imaginar.
Diseño y fabricó unos maravillosos trajes para la Virgen María y San José, y una mantita
bordada con hilo dorado para el Niño Jesús. Decoró el establo con pequeñas joyas tomadas
de sus pendientes y anillos, y rodeó el pesebre de las miniaturas más bellas que encontró.
Posiblemente, no hubo antes un belén tan bonito y cuidado. Era tan especial y único, que
había sido propuesto para varios premios, incluido el gran premio nacional al mejor belén.
Pero precisamente la mañana en que los jueces debían visitarlo, Clara descubrió al
levantarse la peor de las tragedias: su obra maestra ¡estaba totalmente destrozada! Y
cuando la sangre le subía por las mejillas y en su garganta nacía un grito de furia, Cuca, su
hermana pequeña, se acercó a su lado, tiró de su camisón, y dijo toda sonriente:
- ¿Te guzta máz azí? ¡Lo he puezto preciozííízímo! Cuca ayudá a Clara.
¿Cómo gritar al angelito de Cuca, tan bonita ella, que sólo había querido ayudar un poco?
Clara miró lo que quedaba de su belén: los vestidos de la Sagrada Familia adornaban de
cualquier forma a unos pastores y su oveja; la preciosa manta estaba a los pies de la
viejecita del río; incluso las pequeñas joyas y miniaturas de Clara estaban esparcidas aquí y
allá: decorando una casucha, en el bolsillo de una lavandera, o en la olla de comida junto al
fuego. Y grandes y brillantes pegotes de color cubrían los montes y el cielo de aquella
Judea destrozada por la ingenuidad de Cuca.
Dos grandes lágrimas rodaron en silencio por las mejillas de Clara, sabiendo que ya nada se
podía hacer. Pero entonces, al caer sus primeras lágrimas sobre el Niño, vio cómo este
saltaba contento a atraparlas. Después le guiñó un ojo, sopló sobre sus lágrimas y las lanzó
de regreso a sus ojos, antes de volver inmóvil a su sitio en el pesebre. Y en sus ojos,
aquellas lágrimas tocadas por el Niño Dios fueron como unas lentillas que le mostraron todo
11. tal y como era en realidad. Y comprendió que ni el Niño ni su familia querían los lujos ni las
joyas, ni la tristeza de los hombres, , ni un mundo triste y sin color. Y que precisamente por
eso había venido al mundo.
Y sin dudarlo, y con una gran sonrisa de alegría, tomó en brazos a Cuca, le dio el más largo y
sonoro beso y dijo:
- ¡Claro que sí, Cuca! Así está muchísimo mejor
12. Clara y el belén de Navidad
¿Te hubiese enfadado tú con quien, queriendo ayudarte,
te hubiese estropeado algo que te costó
hacer?____________________________________________________________
¿Te gusta la actitud de Clara al final del cuento?_________
¿Valoras tú a tus amigos/as más que las cosas
materiales, como hace Clara al final?______________________
¿Por qué?_________________________________________________________
13. La pequeña Estrella de Navidad
De entre todas las estrellas que brillan en el cielo, siempre había existido una más brillante
y bella que las demás. Todos los planetas y estrellas del cielo la contemplaban con
admiración, y se preguntaban cuál sería la importante misión que debía cumplir. Y lo mismo
hacía la estrella, consciente de su incomparable belleza.
Las dudas se acabaron cuando Dios la llamó. Ella acudió tan rápido como pudo .La estrella se
llenó de orgullo, se vistió con sus mejores brillos. Cuando vio que su lugar era junto a un
humilde establo, sucio y pobre, se enfadó mucho porque creía que era más importante.
Tanto se enfadó que comenzó a arder. Y así se consumió, desapareciendo.
Tan sólo faltaban unos días para el gran momento, y se habían quedado sin estrella.
Entonces Dios mandó a buscar a la estrella más pequeña y alegre del firmamento. Era una
estrella tan pequeña como un granito de arena. Se sabía tan poca cosa, que no daba ninguna
importancia a su brillo, y dedicaba todo el tiempo a reír y charlar con sus amigas las
estrellas más grandes. Cuando llegó ante el Señor, este le dijo:
- La estrella más perfecta de la creación, la más maravillosa y brillante, me ha fallado por
su soberbia. He pensado que tú, la más humilde y alegre de todas las estrellas, serías la
indicada para ocupar su lugar y alumbrar el hecho más importante de la historia: el
nacimiento del Niño Dios en Belén.
Tanta emoción llenó a nuestra estrellita, y tanta alegría sintió, que ya había llegado a Belén
tras los ángeles cuando se dio cuenta de que su brillo era insignificante y que, por más que
lo intentara, no era capaz de brillar mucho más que una luciérnaga.
“Entonces pensó de nuevo “todas las estrellas del mundo”. ¡Seguro que estarían encantadas
de participar en algo así! Y sin dudarlo, surcó los cielos con un mensaje para todas sus
amigas:
"El 25 de diciembre, a medianoche, quiero compartir con vosotras la mayor gloria que puede
haber para una estrella: ¡alumbrar el nacimiento de Dios! Os espero en el pueblecito de
Belén, junto a un pequeño establo."
Y efectivamente, ninguna de las estrellas rechazó tan generosa invitación. Y tantas y
tantas estrellas se juntaron, que entre todas formaron la Estrella de Navidad más bella
que se haya visto nunca, aunque a nuestra estrellita ni siquiera se la distinguía entre tanto
brillo. Y encantado por su excelente servicio, y en premio por su humildad y generosidad,
Dios convirtió a la pequeña mensajera en una preciosa estrella fugaz, y le dio el don de
conceder deseos cada vez que alguien viera su bellísima estela brillar en el cielo.
14. La pequeña Estrella de Navidad
¿Qué opinas de la “estrella importante”? __________________
_____________________________________________________________________
¿Y de la estrella pequeñita?___________________________________
_____________________________________________________________________
_____________________________________________________________________
¿Qué crees que es más importante: ser egoísta y
“creído/a” o ayudar y compartir con los demás? __________
______________________________________________________________________
¿Por qué?__________________________________________________________
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16. La mejor elección
Rod y Tod. Así se llamaban los 2 afortunados niños que fueron elegidos para ir a ver al
mismísimo Santa Claus en el Polo Norte. Un mágico trineo fue a recogerlos a las puertas de
sus casas, y volaron. Los llevaron a una sala, donde quedaron solos. El salón era grande y
estaba oscuro y vacío. Los duendes les avisaron:
- Santa Claus está muy ocupado. Sólo podréis verlo unos segunditos, así que aprovechadlos
bien.
Esperaron largo rato, en silencio, pensando qué decir. Pero todo se les olvidó cuando la sala
se llenó de luces y colores. Santa Claus apareció sobre un gran sillón y también todos los
juguetes que siempre habían deseado Mientras Tod corría a abrazar a Santa Claus, Rod se
giró hacia aquella bicicleta con la que tanto había soñado. Sólo fueron unos segundos, los
justos para que Tod dijera "gracias", y llegara a sentirse el niño más feliz del mundo, y para
que Santa Claus desapareciera antes de que Rod llegara siquiera a mirarle. Entonces sintió
que había desperdiciado su gran suerte, y lo había hecho mirando los juguetes que había
visto en la tienda una y otra vez. Lloró y protestó pidiendo que volviera, pero al igual que
Tod, en unas pocas horas ya estaba de regreso en casa.Desde aquel día, cada vez que veía
un juguete, sentía primero la ilusión del regalo, pero al momento se daba la vuelta para ver
qué otra cosa importante estaba dejando de ver. Y así, descubrió los ojos tristes de
quienes estaban solos, la pobreza de niños cuyo mejor regalo sería un trozo de pan, o las
prisas de muchos otros que llevaban años sin recibir un abrazo u oír un "te quiero". Y al
contrario que aquel día en el Polo Norte, en que no había sabido elegir, aprendió a caminar
en la dirección correcta, ayudando a los que no tenían nada, dando amor a los que casi nunca
lo tuvieron, y poniendo sonrisas en las vidas más desdichadas.
Él solo llegó a cambiar el ambiente de su ciudad, y no había nadie que no lo conociera ni le
estuviera agradecido. Y una Navidad, mientras dormía, sintió que alguien le rozaba la pierna
y abrió los ojos. Al momento reconoció las barbas blancas y el traje rojo, y lo rodeó con un
gran abrazo. Así estuvo un ratito, hasta que Rod dijo con un hilillo de voz acompañado por
lágrimas.
- Perdóname. No supe escoger lo más importante.
Pero Santa Claus, con una sonrisa, respondió:
- Olvida eso. Hoy era yo quien tenía que elegir, y he preferido pasar un rato con el niño más
bueno del mundo, antes que dejarte en la chimenea la montaña de regalos que te habías
ganado ¡Gracias!
A la mañana siguiente, no hubo ningún regalo en la chimenea de Rod. Aquella Navidad, el
regalo había sido tan grande, que sólo cabía en su enorme corazón.
17. La mejor elección
¿Qué hubieses hecho tú?_______________________________________
tú?_______________________________________
¿Qué opinas del cambio que hizo Rod a partir de
entonces?_________________________________________________________
entonces?_________________________________________________________
¿Qué valoras más: las personas o las cosas
materiales?_____________________________________________
_______________________________________________________
materiales?_______________________________________________________
qué?_________________________________________________________
¿Por qué?_________________________________________________________
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18. El felicímetro
Dani estaba muy disgustado con Papá Noel. Era un niño muy bueno, pero le
molestaba ver que muchos otros niños, más malos, recibían más juguetes
por Navidad. Y fueron tantas sus quejas, que una noche el propio Papá Noel
apareció con el trineo en su habitación, y le llevó con él al Polo Norte.
- Quiero enseñarte el mayor de los secretos -le dijo Papá Noel-. Si vienes
te mostraré cómo decidimos cuántos juguetes recibe cada niño en Navidad.
Cuando llegaron, Santa Claus le mostró unos aparatos:
- Esto fue nuestro primer medidor de juguetes. Era una balanza, y los
juguetes se regalaban por peso. Dejamos de usarlo cuando un niño recibió
tantos globos que al explotar derrumbaron las paredes de su casa.
- Ese otro con forma de molde se llamaba "igualator". Servía para
asegurarnos de que todos los niños recibieran los mismos juguetes, pero
como luego no tenía gracia cambiarlos con otros niños, nadie los quería... Y
así fue hablando de los inventos que habían utilizado; algunos realmente
ridículos, otros un poco simplones, hasta que finalmente dijo:- ... pero todo
se arregló con este invento, y desde entonces cada año recibo muchos más
millones de cartas que el anterior. Se llama Felicímetro, y sirve para medir
la felicidad de los niños. Cuando visitamos un niño, ponemos en el felicímetro
todo lo que tiene, y automáticamente nos dice los mejores regalos para él.
- Pues debe estar estropeado, a mí siempre me tocan pocos regalos...-
protestó el niño.
- ¡Qué va! funciona perfectamente. Los niños que como tú tienen muchos
amigos, unos papás y hermanos que les quieren mucho, son generosos y no
buscan la felicidad en las cosas tienen miles de puntos en el felicímetro, y
regalarles muchos juguetes sólo podría bajárselos. Sin embargo, los niños
que están más solos, o cuyos papás les hacen menos caso, o que no tienen
hermanos ni amigos, tienen tan pocos puntos que da igual cuántos regalos
añadamos al felicímetro: nunca pasan de la mitad... ése es el gran secreto
del felicímetro: reciben más quienes de verdad menos tienen.
19. El felicímetro
¿Qué preferirías tú? ___________________________________________
¿Por qué?________________________________________________________
¡Te das cuenta de la suerte que tienes por tener todo lo
que tienes?_______________________________________________________
¿Crees que es justo que haya quien no tenga “nada” ?___
¿Qué podrías hacer tú para mejorar la Navidad de los
que te rodean?___________________________________________________
______________________________________________________________________
20. Regalos de Navidad
La Conferencia de Regalos de Navidad de aquel año estaba llena. A ella habían acudido
todos los jugueteros del mundo, Santa Claus y los Tres Reyes Magos. Como todos los años,
las discusiones tratarían sobre qué tipo de juguetes eran más educativos o divertidos, cosa
que mantenía durante horas discutiendo a unos jugueteros con otros, y sobre el tamaño de
los juguetes. Sí, sí, sobre el tamaño discutían siempre, porque los Reyes y Papá Noel se
quejaban de que cada año hacían juguetes más grandes y les daba verdaderos problemas
transportar todo aquello...Pero algo ocurrió que hizo aquella conferencia distinta de las
anteriores: se coló un niño, se puso en pie y dijo:
- Está bien, no discutáis. Yo entregaré todo lo que no puedan llevar ni los Reyes ni papá
Noel.
Los asistentes rieron a carcajadas durante un buen rato sin hacerle ningún caso. El niño se
levantó, dejó escapar una lagrimita y se fue de allí cabizbajo…Aquella Navidad fue como
casi todas, pero algo más fría. En la calle todo el mundo continuaba con sus vidas y no se oía
hablar de todas las historias y cosas preciosas que ocurren en Navidad. Y cuando los niños
recibieron sus regalos, apenas les hizo ilusión, y parecía que ya a nadie le importase aquella
fiesta. En la conferencia de regalos del año siguiente, todos estaban preocupados ante la
creciente falta de ilusión con se afrontaba aquella Navidad. Nuevamente comenzaron las
discusiones de siempre, hasta que de pronto apareció por la puerta el niño de quien tanto
se habían reído el año anterior, triste y cabizbajo. Esta vez iba acompañado de su madre,
una hermosa mujer. Al verla, los tres Reyes dieron un brinco: "¡María!", y corriendo fueron
a abrazarla. Luego, la mujer se acercó al estrado, tomó la palabra y dijo:
- Todos los años, mi hijo celebraba su cumpleaños con una gran fiesta, y lo llenaba todo con
sus mejores regalos para grandes y pequeños. Ahora dice que no quiere celebrarlo, que a
ninguno de ustedes en realidad le gusta su fiesta, que sólo quieren otras cosas... ¿se puede
saber qué le han hecho?
La mayoría de los presentes empezaron a darse cuenta de la que habían liado. Entonces, un
anciano juguetero, uno que nunca había hablado en aquellas reuniones, se acercó al niño, se
puso de rodillas y dijo:
- Perdón, Jesús: yo no quiero ningún otro regalo que no sean los tuyos. Aunque no lo sabía,
tú siempre habías estado entregando aquello que no podían llevar ni los Reyes ni Santa
Claus, ni nadie más: el amor, la paz, y la alegría. Y el año pasado los eché tanto de
menos...perdóname.
Todos reconocieron que eran suyos los mejores regalos, esos que llenan el corazón de las
personas de buenos sentimientos, y hacen que cada Navidad, el mundo sea un poco mejor...
21. Regalos de Navidad
¿Quién crees que tenía razón: la conferencia de Regalos
o el niño?__________________________________________________________
¿Porqué?___________________________________________________________
¿Qué te gusta más de la Navidad el ambiente o los
regalos?____________________________________________________________
¿Por qué?__________________________________________________________