La participación se refiere a compartir decisiones que afectan la propia vida y la comunidad. En el caso de niños, niñas y adolescentes, la participación debe ser informada y voluntaria para todos, incluyendo a aquellos con capacidades diferentes o en riesgo. La participación de los niños, niñas y adolescentes es importante en asuntos que les conciernan directa o indirectamente a nivel local o de gobierno.