2. Época precolombina
• Hoy se sabe que la primera agricultura intensiva vinculada a asentamientos
estables tuvo su verdadero origen en la selva amazónica, y de allí partió por
el año 4.000 a.C. hacia la costas. En Ecuador se han hallado rastros de
más de 3.000 años dejados por aldeas mayores a dos mil habitantes, que
ya entonces se dedicaban a cultivar yuca y maíz, muchísimo antes que en
México o en el altiplano andino.
• En la Costa Atlántica colombiana (Monsú y Puerto Hormiga) hay indicios
equivalentes de comunidades dedicadas a la recolección de moluscos en el
cuarto milenio a.C. Los yacimientos de Puerto Hormiga abundan en objetos
de piedra, fogones, depósitos de conchas, huesos y muestras cerámicas
análogas a las de Valdivia, Ecuador.
Si habláramos de presencia humana en el territorio anteriores al horizonte
formativo cultural, las más antiguas muestras del Paleo-indio en Colombia
proceden de El Abra, muy cerca a Bogotá. Corresponden a 10.450 años
a.C. Se encuentran en abrigos rocosos formados por un lago que ocupó la
Sabana hace 30.000 años. Otros yacimientos (Tibitó, Tequendama, entre
6.000 y 11.700 años) contienen muestras de la megafauna del pleistoceno -
caballo americano, mastodontes - y entierros humanos.
3. • Las primeras formas de sociedad tribal asentadas en la costa y en los ríos
dieron un vuelco con el aparecimiento de los "cacicazgos" y las estructuras
jerarquizadas de poder, hacia el último milenio a.C.. Entonces viene una
etapa colonizadora de las vertientes montañosas; la adopción generalizada
del maíz; la ocupación extendida del territorio; los asentamientos con algún
nivel de infraestructura; el descubrimiento y práctica de tecnologías de
producción, de urbanismo y de comunicación; el comercio de trueque y
algunas formas de conocimiento científico-matemático- astronómico.
• En el plano político se empiezan a dar simultáneamente las "federaciones
de aldeas", con lo cual se acaban por diferenciar hacia el primer milenio de
nuestra era - y así se mantenían por el tiempo de la llegada de los
españoles -, dos grandes culturas en proceso de formación de "estados": la
Muisca, en el altiplano cundi-boyacense; y la Tayrona, en la Sierra Nevada
de Santa Marta. Se fueron desarrollando seis grandes familias lingüísticas:
1. Chibcha, en el centro, Urabá y Sierra Nevada
2. Caribe, en las costas y las vertientes fluviales
3. Arawak, en la vertiente amazónica y la Guajira
4. Maya, hacia el sur del litoral Pacífico
5. Quechua-aymara, en el sur occidente (Nariño-Cauca), y
6. Tupí-guaraní, en ciertas riberas orientales
4. • Al comienzo de la Conquista, aparte de
los muiscas y los tayronas había por lo
menos una docena de otros grupos, el
mayor de los cuales fueron los "caribes",
situados al norte y en las vertientes de
los ríos.
En su inmensa mayoría fueron
aniquilados en el proceso. Se les
atribuyen estadios de civilización mucho
más atrasados que muiscas y tayronas,
lo cual es tal vez válido respecto a su
desarrollo político-social, pero no tanto
en cuanto a su arte: quimbayas, sinúes,
calimas, tolimas y otros grupos, dejaron
cerámica y orfebrería insuperables.
• Contribuyó a su exterminio el espíritu
guerrero, su poca vocación de
servidumbre, la menor nucleación y
escasa organización política para
negociar, el nomadismo en algunos
casos y la hostilidad ancestral entre
unos grupos y otros, bien aprovechada
por el conquistador.
Amuleto de la cultura
Caribe
5. Paleoindio en Colombia
• Época en la cual los antiguos habitantes
del continente llevaban una vida nómada,
cazaban, inclusive grandes mamíferos de
las zonas frías, utilizando puntas de
proyectil labradas en piedra y
recolectaban frutos silvestres.
• En Colombia hay evidencias
arqueológicas que datan de los 14.000 y
16.000 años a.p. El Paleoíndio apenas
comienza a conocerse. Correal y Van der
Hammen en 1967 en El Abra, Zipaquirá,
Cundinamarca, encontraron un yacimiento
de herramientas y objetos del Paleoindio
de aproximadamente 12.460 años. En
1970 hallaron en Soacha, en la Hacienda
Tequendama restos humanos de más de
10.000 años. Puntas paleoindias de
Colombia
6. El Arcaico en Colombia
• Suceden importantes cambios en el clima; el nomadismo tiene períodos
estacionales y las gentes se establecen en las costas y valles a orillas de
los ríos. Se hace más intensa la recolección de frutos silvestres y de
moluscos. Se amplia la división social por sexo y edad para el cumplimiento
de actividades especializadas relacionadas con la caza, la pesca y la
recolección. Los antiguos habitantes, de este período dejaron evidencia de
su modo de vivir en los llamados conchales, cúmulos de restos de conchas
entre los que se hallan restos de herramientas de hueso y piedra. En
Colombia el conchal más antiguo encontrado hasta el momento es el de
Puerto Hormiga, a orillas del Canal del Dique, en el Departamento de
Bolívar que data del año 3000 a.p. y que presenta fragmentos cerámicos,
uno de los más antiguos de América.
• En las zonas bajas de selva tropical grupos pequeños y autónomos de
cazadores, recolectores y agricultores nómades, hace mas de mil años
ocuparon las riberas de numerosos ríos de la Amazonia, la Orinoquia y la
Región del Pacífico. Para autores como Lathrap (1970) el poblamiento
amazónico fue el resultado de una expansión originada desde la costa en la
desembocadura y llanura aluvial del río Amazonas 3000 años antes de la
era presente.
7. El Formativo en Colombia
• Abarca desde el año 2000 a.p. hasta el siglo XVI de la nuestra era. En este período
hay un desarrollo de la agricultura, la metalurgia y la cerámica.
• Formativo Inferior aparece la cerámica utilitaria; se da una organización social más
compleja, posiblemente tipo clanes, y se presentan algunas comunidades
relativamente estables de horticultores. En Colombia el Formativo Inferior tuvo un
desarrollo particular en la Costa Atlántica En esta época se domestica y cultiva la
yuca y se desarrolla la cacería.
• Formativo Medio existen grupos sedentarios dedicados a la agricultura -maíz, yuca-;
se ocupan las tierras altas; aparecen los primeros cacicazgos, organización compleja
que agrupa clanes diferentes con una relativa organización económica. Surge la
metalurgia del oro y el cobre. La cerámica se enriquece con motivos decorativos,
aparece la estatuaria y se hacen tejidos de algodón. Los principales cacicazgos
correspondientes a este período en Colombia corresponden a las culturas Tairona,
Sinú, Quimbaya, Pijao, Muisca, Calima, Páez, Pasto y Quillacinga, Tumaco y el
complejo San Agustín.
• Formativo Superior se presentan confederaciones de tribus. Compleja
estratificación social y una mayor división social del trabajo. Desarrollan técnicas
avanzadas de cultivo con la construcción de terrazas y sistemas de riego. Gran
desarrollo de la cerámica decorativa, los tejidos y la orfebrería. Se destacan en este
período la cultura Tairona de la Sierra Nevada y la Muisca; esta última, ocupó el
altiplano de Cundinamarca y Boyacá.
9. Ubicación geográfica
• El territorio de los muiscas abarcaba las cuencas
y valles del río Bogotá hasta Ten; del río Negro
hasta Quetame, el Guavio hasta Gachalá, de
Garagoa hasta Somondoco, de Chicamocha
hasta Soatá y del río Suárez hasta Vélez.
Destacaban los palacios compuestos por bohíos
rodeados por dos o tres empalizadas
concéntricas, semejantes a los alcázares árabes
del sur de España.
Este "Valle de los Alcázares" dio pie para el
nombre de Nuevo Reino de Granada, era el
núcleo del cacicazgo de Bogotá.
• Con su sede de gobierno en Funza, este era el
cacicazgo regional más extenso y poblado de
todo el norte de Sudamérica en aquel siglo. Sus
gobernantes, los Zipas, lo habían conformado
recientemente anexando los cacicazgos
intermedios de Guatavita, Ubaque, Ubaté,
Zipaquirá y Fusagasugá.
10.
11. Agricultura
• Los Muiscas fueron básicamente
agricultores y tuvieron grandes
conocimientos sobre los ciclos de la lluvia,
los cambios de la luna y el cuidado de los
cultivos.
• Cultivaron en tierras planas utilizando en
algunos casos hileras de montículos;
también usaron terrazas y se valieron de la
irrigación natural con apoyo de los ríos y las
lagunas cercanas a sus poblados; entre las
más importantes están Guatavita, Siecha,
Tota, Fúquene e Iguaque.
• La base esencial de la economía muisca
fue la agricultura; cultivaron principalmente
el maíz de diferentes variedades, que se
convirtió en la base de la alimentación.
Además, sembraron algodón, yuca, batata,
calabaza, hibia, arracacha, piña, aguacate,
coca, tabaco, etc.
Cultivo de maíz
12. Comercio
• Sobresalieron por su habilidad como mercaderes;
practicaron el intercambio mercantil entre sus
tierras frías y las de los llanos. Uno de los
principales productos que los Muiscas
intercambiaron a través del sistema de trueque fue
la sal, a cambio de la cual recibían oro, que luego
trabajaban a su manera para volverlo a
intercambiar. Lo mismo pasaba con las
esmeraldas, amatistas y topacios, piedras
preciosas que cambiaban por sal y después
regresaban a sus antiguos dueños, pero esta vez
pulidas y talladas, y por lo tanto, con mayor valor
agregado.
El comercio de los Muiscas se complementó con el
desarrollo que lograron en los medios contables
crediticios, ya que supieron diferenciar el producto
y su equivalente luego de agregarle más trabajo.
De la misma manera llegaron a establecer tasas de
interés sobre créditos comerciales, lo que quedó
sustentado en una legislación de acuerdos
comerciales entre las partes. Usaban como
monedas discos de oro.
Sal
13. Organización social
• La base de la organización social muisca era el Clan, emparentadas por
vínculos consanguíneos y caracterizado por la exogamia. Aunque se
permitía el matrimonio poligámico, en realidad solo lo practicaba la nobleza.
• Los individuos trabajaban en común las tierras de su jefe de clan, o del
sacerdote o jeque. Varios clanes formaban una tribu y sus miembros
trabajaban las tierras del cacique o uzaque (jefe de tribu), quien cobraba los
tributos y entregaba parte de ellos al Zipa o al Zaque, jefes de estas
confederaciones, conformadas por varias tribus.
• Los jefes de confederación, los jefes de tribu y los sacerdotes formaban una
clase superior, que se apropiaba de parte de los excedentes de producción
agrícola y minera. Ello originó la diferenciación de grupos dentro de la
sociedad y condujo a la formación de clases y al surgimiento de la
propiedad privada y del estado. La apropiación de los excedentes de
producción se efectuaba mediante el cobro de un tributo o impuesto, que
debían pagarse en especie, y del trabajo, obligatorio también, en los
cultivos de los jefes de tribu y de los sacerdotes. Este sistema impidió que
se estableciera la esclavitud en la sociedad muisca.
14. Legislación
• Los Muiscas se regían por un complejo
sistema de sentencias o leyes muy
estrictas, que sustentaron el orden moral,
político y social llamado código de
Nemequene, transmitido oralmente.
• El código castigaba el incesto y
condenaba a muerte al homicida, aunque
hubiera conseguido el perdón de los
familiares del difunto. El hurto se
castigaba con la pena de muerte al igual
que el soborno. Si una mujer moría en el
parto, el marido debía indemnizar a la
familia de la esposa. Existía la pena de
muerte para quien violara una mujer y
para el que huía de la guerra. Además,
se limitaba el lujo en la gente común.
Cacique muisca
15. Organización política
• A la llegada española a territorio muisca ya existían 5 federaciones independientes,
formadas por 25 tribus. Cada federación tenía su gobierno independiente y
jurisdicción territorial sobre una serie de poblados que les pagaban tributo.
• 1. La confederación de Bacatá o Bogotá: Era la más extensa, a ella pertenecían
unas 20 tribus las cuales gobernaba el zipa; comprendía gran parte del
departamento de Cundinamarca.
2. La confederación de Hunza o Tunja: Abarca algunas zonas de clima frío al
norte de Cundinamarca y gran parte de Boyacá. El Zaque la gobernaba.
3. La confederación de Tundama o Duitama, compuesta por pocas tribus
4. La confederación de Sogamoso o Iraca: de escasa extensión territorial. Allí
residía el sacerdote más importante, dedicado a la adoración del sol.
• 5. La confederación de los indios Guanes: formada por un subgrupo de los
muiscas ocupaba las ollas de los ríos Suarez y Chicamocha y la mesa de Lérida en
Santander.
• Entre los Muiscas existieron seis clases: los sacerdotes o jeques, la nobleza
guerrera o los guechas y los pregoneros o aquellos funcionarios que hacían conocer
la voluntad del cacique. También estaban los comerciantes, los artesanos y los
agricultores, que se regían por un orden jurídico rígido. Los mineros, en especial los
que trabajaban en las minas de sal y esmeraldas y por último, los esclavos que eran
prisioneros de guerra y a veces servían para los sacrificios religiosos.
16. Ciencia
• Las ciencias estaban representadas por la
astronomía, la meteorología y la confección
de un calendario que servía de base para la
agricultura, ya que los cultivos dependían
directamente del comportamiento del sol
(Zué) y de la Luna (Chía). Dividían el año
solar en cuatro épocas, delimitadas por los
períodos de invierno y verano, que a su vez
se subdividían de acuerdo a los cambios
lunares. Utilizaron el sistema basado en los
dedos de las manos y de los pies para
contar; al llegar al veinte, comenzaban otra
veintena; el palmo y el pie fueron sus
medidas de longitud.
Calendario Muisca
17. Religión
• Los sacerdotes Muiscas eran los jeques y éstos, para desempeñar su
oficio, se recluían por algún tiempo en una especie de “seminario”.
Practicaban el ayuno y dedicaban toda su vida a la religión.
• Los Muiscas representaron en diferentes animales a sus principales
divinidades y situaron al hombre como centro de la naturaleza. El hombre
representó la fuerza, el poder, la sabiduría y la prudencia; la mujer, la vida,
la fertilidad y la organización.
• Los muiscas eran idólatras. Adoraban al Sol a quien llamaban Sue y a la
Luna, Chía. Rendían culto al agua, al arco iris. Su dios principal fue
Chimininchagua, quien era el origen de todo y fue quien creó la luz, pues el
mundo antes era oscuro. Muiscacum era el dios protector y si se le ofendía,
se vengaba, Bachue, la madre de la humanidad y diosa de las legumbres,
Chaquen, dios de los corredores y Bochica, héroe civilizador.
• Los muiscas por lo general rendían culto a los muertos y como creían en la
inmortalidad del alma los enterraban con alimentos, joyas, vestidos, etc. La
muerte era concebida como el comienzo de un viaje que los conduciría a un
mundo parecido al de ellos y en donde la vida sería fácil y difícil, de acuerdo
con el comportamiento que hubieran tenido en esta vida.
19. Ubicación geográfica
Los Tayronas se situaron entre el nivel del
mar y una altura aproximada de 2.000
metros, principalmente en la zona de Santa
Marta, cerca del río Bonda y a lo largo de
los ríos Ariguaní, Cesar y Ranchería,
también en los valles de los ríos Palomino y
Buritaca.
Los Tayrona se acogieron, tanto a las
bondades que le brindaban la Sierra
Nevada como a las restricciones que esta
les imponía, y poco a poco lograron
combinar esas bondades y esas
restricciones del medio para afianzar y
garantizar su permanencia y reproducción
biológica en esta región, como lo señalan
hoy día las ruinas de numerosos poblados
con infraestructura de piedra, caminos
terrazas de cultivos, canales y puentes.
20. Agricultura
• Los Tayronas eran excelentes horticultores y, favorecidos por la diversidad
de sus climas, pudieron cultivar e intercambiar casi todos los frutos que se
cosecharon en Precolombia. Para mantener al fertilidad del suelo utilizaban
terrazas que impedían la erosión de los suelos, aplicaron la irrigación
artificial, conduciendo por canales el agua de los ríos hasta sus
sementeras.
• Vivían principalmente de vegetales y frutas, su vecindad al mar determino
para los Tayrona una alimentación a base de pescado, mientras que sus
montañas les dieron cuantiosa cacería de venados y aves como paujiles,
tórtolas y pavas. También el mar les suministraba la sal, no sólo para
condimentar sus alimentos, sino para conservar el pescado seco, del cual
hacían comercio con las tribus que les proveían de oro.
• Complementaban su nutrición con la miel de abejas, que supieron cultivar
con gran esmero y en abundancia tal, que cierto soldado español contaba
haber visto en tierras Tayronas hasta 8.000 colmenas. De frutas y granos
supieron fermentar muchas clases de bebidas embriagantes.
21. Comercio
• Las relaciones comerciales se
efectuaron interna y externamente.
Los grupos de la Sierra daban oro y
mantas a cambio del pescado y la
sal de los costeros. Las esteras, los
collares de oro y cuentas de piedras
semipreciosas, sirvieron de
elementos de trueque con otras
culturas, inclusive con las de las
tierras altas de Cundinamarca y
Boyacá, de donde llegaron
esmeraldas a la Sierra Nevada.
Colgante antropomorfo
Tayrona
22. Orfebrería
• Se considera que el desarrollo de la
orfebrería Tayrona estaba en pleno apogeo
en los comienzos del siglo XVI ya que
poseían bastantes talleres de fundición.
• Se caracteriza por la perfección técnica que
lograron al elaborar sus trabajos; emplearon
la fundición a la cera perdida complementado
con el martillado, el repujado, la soldadura y
la fundición en moldes abiertos o cerrados.
• En la metalurgia Tayrona, los objetos son
variados en cuanto a la forma y a las técnicas
empleadas en su elaboración. Existen
figuritas fantásticas que llevan grandes
atavíos de plumas y máscaras de felinos; hay
aves y reptiles, discos repujados, cascabeles,
brazaletes, narigueras y otros objetos.
23. Ingienería
• Los Tayronas sobresalieron por su destreza
urbanística en ingeniería, lo que los situó como
una de culturas precolombinas más adelantadas
de América. En lo urbanístico se destacaron por la
construcción de ciudades en forma circular en las
zonas planas de las estribaciones de la Sierra
Nevada, a las cuales se llegaba por medio de
caminos empedrados y/o puentes colgantes.
Estos poblados contaron con canales de desagüe,
zonas públicas y residenciales con casas de ricos
y pobres, que se diferenciaron por el tipo de base
sobre la cual se construyeron.
• Las características de las ciudades Tayronas son
las plataformas curvas y revestidas de piedra para
las casas situadas en las laderas, escaleras de
piedra, muros de contención para evitar
deslizamientos, canales y sistemas de drenaje
tanto para la parte urbana como para las zonas
agrícolas y una plaza pública para transitar y para
ceremonias especiales Escaleras Tayronas
24. Organización social y política
• A la llegada de los españoles la sociedad Tayrona había evolucionado
hacia un sistema de clases, en el cual los factores económicos tenían
mayor importancia. Había un grupo importante de artesanos y comerciantes
Intertribales.
Durante el siglo XVI, la población indígena de cultura Tayrona tenia su
asiento principalmente en pueblos nucleados y, al parecer, existía, un
particularismo político pronunciado, arraigado en grupos locales cuyas
autoridades políticas residían en algún pueblo central donde se encontraba
la mayor parte de la población.
La estructura política de estos grupos locales indica que todos los pueblos
tenían un cacique, los cuales dependían a su vez, de otros caciques
principales. Se menciona que algunas poblaciones estaban divididas en
barrios, que eran más, un grupo de casas o aldeas dependientes de otra
población. Cada barrio tenia su propio cacique, y el conjunto de varios
barrios tenia un cacique principal.
• En la cúspide de la pirámide social estarían los caciques, de quienes
descansa la responsabilidad política y religiosa. Entre el pueblo común, en
la base de la estructura social, se encuentran los especialistas de oficio,
tales como agricultores, artesanos y mercaderes.
25. Periodo Nahuange
• Las primeras comunidades de orfebres, agricultores y pescadores que
habitaron las costas de las vertientes norte y occidental de la Sierra Nevada
de Santa Marta explotaban diversos recursos del mar, la playa, las
ciénagas, ríos y montes aledaños, además de cultivar maíz y otros
productos. Desde 200 d.C. fueron expertos orfebres y hábiles artesanos de
la talla de conchas y piedras semipreciosas.
En recipientes cerámicos y en colgantes o pectorales de concha, piedra o
metal, representaron de forma realista mujeres, aves y felinos.
• En la orfebrería Nahuange sobresalen las piezas martilladas en aleación de
cobre y oro, denominada tumbaga. Tienen superficies muy pulidas, muchas
de llamativas tonalidades rojizas. Puntos, círculos, triángulos, animales
esquemáticos y serpientes de dos cabezas se combinan en motivos
decorativos que adornan narigueras y pectorales emblemáticos.
• Hacia el año 900 d.C. la forma de vida del período Nahuange cambia y se
da inicio a lo que se denomina período Tairona.
26. Periodo Tayrona
• En los afilados contrafuertes y los valles profundos cubiertos de bosque de la
esquina noroccidental de la Sierra Nevada, la gente del período Tairona levantó
ciudades sobre cimientos de piedra, caminos enlozados y drenajes. En terrazas de
cultivo escalonadas cultivaron maíz, yuca y aguacate. Una orfebrería recargada en
adornos distinguía a los caciques, dotados de poder político y religioso. Colgantes y
pectorales en forma de aves con alas desplegadas demuestran la continuidad de
algunas ideas del pensamiento simbólico de estas sociedades desde el período
Nahuange hasta la Conquista.
• Los taironas resistieron la Conquista con guerras que duraron más de 75 años.
Varios cronistas españoles los conocieron y escribieron maravillados relatos y
descripciones.
• Durante el período Tairona los destinos de la comunidad eran regidos por una
poderosa élite de chamanes que decían tener control sobre las fuerzas esenciales de
la naturaleza, el ordenamiento del cosmos y las acciones humanas. Eran los
encargados de velar por el bienestar material y espiritual de la comunidad. En
múltiples objetos se los ve representados en el trance de la transformación, como en
la emblemática figura del hombre-murciélago, señor de la noche y el inframundo.
• La figura del hombre transformado en murciélago puede verse en pectorales,
colgantes y campanas metálicas, en remates de bastón tallados en hueso y en
objetos de cerámica. Pero también se encuentran en las tumbas de los personajes
importantes del período Tairona los atuendos que les servían para simbolizar esta
transformación. Los adornos de sus viseras metálicas aludían a las membranas
internas o tragus de la oreja del animal; las narigueras cilíndricas levantaban la nariz
como la hoja nasal de algunas especies y los adornos sublabiales imitaban las
carnosidades de su labio inferior.
27. Conquista
• Los tairona fueron los primeros habitantes del territorio colombiano que
sufrieron la trágica presión de la conquista española. Fue don Rodrigo de
Bastidas, fundador de Santa Marta y descubridor de la desembocadura del
río Magdalena, quien emprendió primero la conquista de los tairona, según
la Recopilación historial de fray Pedro de Aguado.
• Bastidas con la mitad de la gente española que había en Santa Marta,
metiéndose tierra adentro por los pueblos de los indígenas, los cuales le
recibieron en paz y le dieron presentes de las riquezas que tenían en
cantidad de 18.000 pesos de oro fino.
• Después, García de Lerma y el teniente Palomino salieron a pacificar
algunas provincias de los indios. Como pueblos situados en la misma costa
que recibía las naves de España, los taironas fueron sometidos a la
servidumbre y rápidamente desapareció su cultura en la región limítrofe con
los conquistadores para refugiarse en las cumbres de la Sierra.