El documento describe las estrategias de comunicación exitosas y no exitosas de dos agencias gubernamentales españolas. La Dirección General de Tráfico (DGT) tuvo éxito al revertir la tolerancia hacia los infractores de tránsito mediante campañas que resaltaron la seguridad vial y aplicaron sanciones de forma justa. En contraste, el Ministerio de Industria y Energía fracasó en promover el ahorro de energía debido a una estrategia deficiente que no explicó bien los motivos y generó percepciones de