1. Planos de fotografía
Plano general: Se usa para visualizar completamente a nuestro modelo y
abarca todo los elementos de una escena, es decir, que aparece todo el
cuerpo de pies a cabeza, sin ningún tipo de recorte.
Plano americano: También conocido como plano tres cuartos, tiene su
origen en las películas de western americanas, que se caracterizaban por
sus encuadres por debajo de la cadera hasta las rodillas. Es muy útil
cuando se quiere retratar a varias personas.
Plano medio: En este se muestra al modelo desde la cabeza hasta la
cintura, y también se puede emplear para fotografiar a varias personas
interactuando. Se emplea con regularidad en la fotografía de moda ya que
permite destacar la belleza de la persona.
Plano medio corto: Se le puede conseguir con otros nombres como plano
pecho o plano busto, aunque en lo personal me parece más profesional
llamarlo plano medio corto, y consiste sencillamente en mostrar a la
persona desde la cabeza hasta la mitad del pecho. La idea de este tipo de
plano es enfocar la atención exclusivamente en la persona aislándola de su
entorno.
Primer plano: Se emplea generalmente para destacar la mirada o el gesto
de una persona, y el encuadre va desde la cabeza hasta los hombros. Es el
más indicado para el retrato del rostro, ya que, destaca los detalles. Suelen
usarse encuadres verticales, aunque esto no es una regla estricta.
Primerísimo primer plano: Este tipo de plano es mucho más agresivo e
íntimo que los anteriores. Se logra encuadrando desde la cabeza (cortando
por el medio o por encima de la frente) hasta la punta del mentón. Hay que
cuidar mucho los detalles en este tipo de plano, controlar el enfoque y la
2. profundidad de campo es primordial, de lo contrario se puede estropear la
captura.
Plano detalle: Se emplea para destacar elementos específicos, con este
tipo de plano se pueden lograr encuadres creativos y originales, requiere de
mucha capacidad de observación por parte del fotógrafo. En este tipo de
plano el acercamiento se maximiza para enfatizar ciertos elementos que de
otra manera podrían pasar desapercibidos. No se debe confundir con
fotografía macro.
Existen otras clasificaciones que varían ligeramente de acuerdo a los
autores, pero básicamente en fotografía de retrato son las mencionadas
anteriormente, algunas con ciertas variaciones.
1. Plano general: Cuerpo completo.
2. Plano americano: Hasta las rodillas.
3. Plano medio: Hasta la cintura.
4. Plano medio corto: Hasta el pecho.
5. Primer plano: Hasta los hombros.
6. Primerísimo primer plano: Solo el rostro.
7. Plano detalle: Un elemento aislado.
4. Centro de un interés
Se denomina CENTRO DE INTERÉS al elemento que más destaca, o se quiere destacar, en
una fotografía. Este puede ser una persona, un animal, un objeto, un edificio, un
monumento…sencillamente, una parte de la escena. En esta fotografía publicitaria de
Pérez Guerrero para una empresa de lencería, el centro de interés se establece mediante
una composición que obliga a un recorrido visual que inevitablemente acaba en la prenda
interior de la modelo. Para que destaque su color blanco, el fotógrafo utilizó un sofá de
color oscuro y colocó el tema principal descentrado, de modo que ocupase la parte
izquierda de la imagen. Una vez precisado el punto de interés no es imprescindible
situarlo en el centro de la imagen ni en primer término, tal como se explicará a lo largo de
esta sección. El aprovechamiento de los elementos que integran el entorno de la
fotografía, el perro no es de gran ayuda para fijar en él, el centro de interés. Por ejemplo
decorativo, la copa de champagne, unas huellas o una sombra pueden llevar la mirada
hasta la figura, máscara, sombrero, etc. sugieren al protagonista conducir la atención
hasta el motivo. Fotografía publicitaría donde queda estudiado el centro de interés, por
cierto el protagonismos de la mujer no es casual como nada en publicidad.
Elemento sorpresivo
Lo que queremos conseguir con el siguiente efecto es usar un mismo escenario con la
misma persona u objeto en distintas posiciones.
Lo mejor de este curioso efecto, es que da un juego enorme a la fotografía y además
de divertido, podremos conseguir fotos en un momento muy llamativo y sorprendente.
El límite tan sólo lo da nuestra imaginación.
Para empezar lo único que necesitamos es un escenario fijo, que no haya ningún
objeto móvil ni nada que pudiera aparecer en un momento inadecuado. También
debemos preocuparnos por conseguir una iluminación correcta de toda la escena, para
que no nos varíe cuando realicemos diversas tomas, ya que podría estropear el
montaje. Muy importante dejar todos los parámetros fijos (exposición, ISO, balance de
blancos…). Normalmente con usar la cámara en manual, será suficiente para conseguir
este bloqueo.
Una vez estudiado todo correctamente, debemos colocar la cámara en un lujar fijo y
no debemos moverla lo más mínimo en el tiempo que dure todo el proceso. Para
realizar la toma dependiendo de cuál sea el motivo a fotografiar, podremos usar el
tiempo de retardo o un mando a distancia. Si os vais a fotografiar vosotros mismo en
varias posiciones, lo más cómodo es usar el tiempo de retardo y después colocaros en
la posición elegida.
5. Después de esto ya sólo nos queda elegir que o quien será el motivo que clonaremos y
a partir de ahí todo queda en manos del Photoshop. Así que ahora explicaremos paso a
paso como se realiza el método de los clones
Ley de Tercios
La denominada regla de los tercios divide la escena en tres partes, tanto horizontal como
verticalmente. Las líneas que determinan estos tercios se cortan en puntos estéticamente
adecuados para situar el centro de interés, con lo que evitamos que éste, al estar situado
en el centro de la imagen resulte estático.
LaLey de los Tercios: Se marca, en elrecuadro fotográfico deben trazarse, imaginariamente,
dos líneas equidistantes verticales y dos horizontales, siendo en torno a alguno de los cuatro
puntos donde secruzan las cuatro líneas,en donde debe colocarse el motivo que deseamos
resaltar dentro de la composición.
Esto ocasiona un arreglo asimétrico de la imagen, con el polo de máximo interés visual
encontrándose relativamente cerca de alguna de las cuatro esquinas del recuadro, y el área
central de la gráfica ocupada por elementos secundarios.
Es posible y hasta recomendable, cuando se pueda hacer, cumplir las tres leyes de La Regla
de Oro en una misma fotografía, pues estas no solo son perfectamente compatibles entre
sí, sino también complementarias.
Los puntos fuertes
6. Según la división por tercios de una escena, la confluencia de los tercios marca unos
puntos donde se hacen llamativos los objetos, llamados puntos fuertes. El centro es un
punto fuerte. Es recomendable hacer coincidir los objetos con estos puntos.
Ley de la mirada
Es aquella ley en que toda persona, animal o cosa, dentro del recuadro fotográfico debe
de tener más espacio libre hacia su parte frontal que lo que ocupa su parte trasera,
independientemente de la amplitud de lo abarcado en el encuadre de la toma. Incluso
podemos recortar el borde del recuadro fotográfico, la parte del elemento gráfico en
cuestión por su parte posterior, si este se encuentra en un plano cercano a la cámara o es
de dimensiones muy grandes.
7. Siguiendo la pauta de estas leyes, concederemos más o menos espacio a nuestro objetivo
principal, (el individuo, personaje o plano) según la importancia del campo que tengamos
delante, siempre que sea directamente proporcional entre el valor de lo mostrado y el
espacio que nos ocupa.
Fotos donde se ven elementos superpuestos y la manera en que se hacen
En los artículos donde abordábamos horizontales y verticales comprobábamos que existía
cierta correspondencia con las líneas del marco, esto derivaba en un mejor ajuste a
determinadas proporciones de encuadre. Bien, las líneas diagonales rompen dicha
asociación no precisando alinearse y permitiendo una variedad de ángulos compleja que
no poseían verticales y horizontales. Surge entonces una variable intrínseca a las
diagonales: el grado de inclinación, ¡muy importante! Dicha inclinación provoca tensión
compositiva otorgando propiedades muy marcadas: dinamismo, velocidad y dirección más
allá de la expresión de una vertical, más actividad y vida en la imagen. El máximo ángulo
que podremos conseguir (a camino entre una vertical y una horizontal) será de 45º,
convirtiéndose en una potente herramienta para expresar el máximo de actividad.
8. Claro ejemplo de juego de líneas en perspectiva, incluso el conjunto de
verticales formado por las columnas forma una diagonal.
9. Si la asociación de verticales y horizontales con la fuerza de la gravedad era
estable, en ésta ocasiónno lo es. Una diagonalprovocaráinestabilidady, como
apuntábamos antes, cierta tensión no resuelta. Tengamos en cuenta que la
mayoría de los objetos creados por el hombre se componen de verticales y
horizontales y, en la mayor partede los casos, la diagonal apareceúnicamente
por efecto de la perspectiva. ¡La perspectiva! Otra característica más que
apuntarle a las diagonales, especialmente útiles cuando surgen varias en una
misma escena y convergen, ¡un gran director para los ojos! Las implicaciones
derivadas de la perspectiva en éste caso son obvias: profundidad y distancia.
¿Lo resumimos?
No precisan alinearse con las líneas del marco.
Permiten una variedad de ángulos (grados de inclinación) compleja
Su máxima expresión corresponde a una diagonal de 45º
Más dinamismo, velocidad y dirección que el resto de líneas
Su relación con la fuerza de la gravedad provoca inestabilidad, tensión no
resuelta
En la mayoría de los casos aparecen por efecto de las perspectiva
Varías diagonales convergiendo constituyen una potente herramienta para
dirigir la mirada
Su relación con la perspectiva provocan sensación de profundidad y
distancia