El corazón bombea sangre en un ciclo continuo que incluye la contracción (sístole) y relajación (diástole) de las aurículas y ventrículos. La sangre fluye desde las venas a las aurículas, luego a los ventrículos, y desde allí a las arterias que distribuyen sangre al cuerpo. El ritmo cardíaco se controla en los nodos sinoauricular y auriculoventricular, y puede verse afectado por factores como la edad, el género, el estrés y los medicamentos.