Roni y Carapuchina, una gigante, se conocieron nadando en la playa de Rodeira. Pasaron el día juntos nadando, tomando el sol y aplicándose crema. Más tarde fueron a comer a un bar cercano y a la casa de Carapuchina, donde invitaron a la abuela de ella a tomar té. Durmieron juntos y al día siguiente desayunaron zumo de naranja y galletas. Después de pasear por el campo y comer un bocadillo, volvieron a nadar, ganando Carapuchina una