1. EVOLUCIÓN DE LA PINTURA EN SAN LUIS
Las primeras manifestaciones artísticas de Nuestra Provincia se remontan a las pinturas rupestres,
enmarcadas en los cordones serranos de San Luis, Tilisarao y los Comechingones. Éstas son en su gran
mayoría pictogramas, figuras rectilíneas y geometrizantes, símbolos, círculos, camélidos, guanacos,
pumas, figuras humanas, serpentiformes, ofidios. Los colores empleados fueron negros, blancos, rojos,
amarillos. Las máscaras rituales guerreras en blanco, negro y rojo eran un emblema a la hora de
enfrentarse los primitivos habitantes de algunas zonas como la sierras de los Comechingones. La
mayor parte de estas pinturas no han resistido el paso del tiempo. Otras en cambio han sufrido el
ataque del hombre y su intento de desprenderlas de su sitio natural. Las pocas que aún subsisten se
encuentran protegidas por la Ley Provincial de Patrimonio Arqueológico Nº 3.642.
Los registros de material pictórico y gráfico durante el siglo XIX nos llegan de la mano de numerosos
viajeros europeos que visitaron la provincia, paso previo a Chile, quienes conocedores del arte del
grabado y la litografía cito a al inglés Schmidtmeyer, los franceses De La Touanne, Raymond Quinsac
de Monvoisin, León Palliere y el alemán Mauricio Rugendas.
Los primeros retratos y naturalezas muertas gestadas en nuestra provincia llegaron de la mano de los
europeos Antonio Contucci, José Bouchet, Carlos Deluigi, y luego las puntanas Carmen Calderón, Rosa
Romanella y los hermanos Pinto Luis, Agustín y Francisco. Que desembocan en un grupo de
desconocidos copistas de famosas obras del arte universal. La obra de Rafael Radogna“Pringles
arrojándose al mar” fue el primer retrato histórico de un héroe puntano pintado por un extranjero.
Es a partir de 1918 que san Luis comienza a contar con obras y artistas genuinos, tal es el caso del gran
artista pintor y escultor Nicolás Antonio(Russo) de san Luis, para diferenciarlo así de su padre y su
abuelo) un honor para todos los puntanos por su gran trayectoria no solo en la provincia, el país sino en
el exterior. Ganador de muchos premios y poseedor de una expresividad y creatividad admirable. Otros
puntanos también de renombre fueron Emilia Mercedes Hartlieb (de Arduco), Wladimiro Melgarejo
Muñoz destacado en su trabajo de grabador y Antonio Miguel Nevot en su dualidad de pintor-escultor.
Entre 1920 y 1948 el período de entreguerras y segunda guerra mundial, dejo en san Luis un vacío
artístico, tras la partida de Nicolás Antonio a Europa y Vacca a Buenos Aires. Sin embrago se organizan
en la provincia numerosos encuentros y exposiciones con el objetivo de motivar a los artistas a generar
nuevos talentos de una de tantas de ellas surge Mateo Rafael Mollo. Nuevamente la década del 30 es
un vacío de pintores locales pero si un lugar de asilo para muchos artistas pasajeros que ven en la
serranía puntana el motivo de su obra.
Solo hacia fines de los 40 se destacan los puntanos Blanca Rosa Luco, Eleonora Petit Bon, Guillermo
Velázquez, Ercilio Domínguez (autor del óleo fundacional de San Luis) dan paso a una generación del
50 rica en paisajismo junto a Juan M. Shur, Víctor Hugo Fernández (Antú-Co) Alberto López Claro,
Asunción Manca de Heredia, Vicente Vacca, Antonio San Miguel, Gringa Poblet, Gaspar Di Gennaro,
Héctor Bianchi Domínguez, Marino Juan Accetta, Yolanda Gola de Acceta, Norma Elsa Piccolo, Jesús
Rodrigo, María Orfelina Sarancho, Palmira Scrosoppi.
Desde el año 2000 existe en la provincia las Becas Bas XXI, donde han surgido un centenar de artistas en
todas las disciplinas muchos de los cuales tienen trascendencia nacional y otros hasta viven en nuestro
pueblo. El objetivo de las mismas es fomentar la actividad artística provincial con improntas de lo local,
patrimonial y natural.
Ver en la Web:
Archivo Histórico de la Provincia, http://ministerios.sanluis.gov.ar/canal.asp?IdCanal=1907