El documento explica los gases ideales, los cuales se comportan de forma predecible según la Ley del gas ideal y la ley de Charles Gay-Lussac. Los gases ideales no tienen interacciones moleculares y su presión se debe a los choques con las paredes del recipiente. Algunos ejemplos de gases ideales son el helio, hidrógeno y argón. La mayoría de los gases reales se comportan como ideales a presiones y temperaturas normales.