2. Había un cucarachita
muy sandunguera que
vivía en una casita de
madera en la barriada
Cundeamor. Todos la
conocían como la
Cucarachita Martina.
3. Un día limpiando en
su casa encontró una
peseta y compró un
polvo que olía a
jazmines para estar
perfumada cuando la
visitaran y para
conseguir novio.
4. Esa tarde se vistió y se
fue al balcón a echarse
fresco. La despertó el
Señor Perro Sato quién
le preguntó si quería
casarse con él. Martina
le preguntó cómo le
hablaría y el perro le
dijo: ¡JAU JAU JAU.
ME GUSTAS MÁS
QUE EL PEGAO!
Martina le dijo que no.
5. Luego vino el Señor
Gato Barcino quién le
preguntó a Martina si
quería casarse con él.
Le dijo que le hablaría
de esta forma:
¡MIAOU, MIAOU, MI
AOU. SOY DULCE
COMO MELAO! A
esto Martina le dijo que
no.
6. Después recibió la visita
del Señor Gallo quién
también le pidió
matrimonio y le dijo
que le hablaría de esta
forma:
¡QUÍQUIRIQUÍ, SOY
DUEÑO DE TI!
¡COCOROCÓ, TU
DUEÑO SOY YO! A
Martina no le gustó
esto y le dijo que no.
7. Entonces vino el Señor
Ratón Pérez y hablaron de
muchas cosas hasta que le
pidió a Martina que se
casara con él. Le dijo que
le hablaría así:
¡CHUÍÍ, CHUÍÍ, CHUÍÍ,
LO ERES TODO PARA
MÍ.
CHUÍÍ, CHUÍÍ, CHUÍÍ, L
O ERES TODO PARA
MÍ! Martina le dijo que
sí.
9. Para el primer
aniversario la
Cucarachita Martina
limpió, le cocinó el
postre favorito del
Señor Ratón Pérez y se
fue coser el traje que se
hiba a poner.
10. Cuando llegó el
Ratoncito Pérez olió
su postre
favorito, arroz con
dulce y fue a la
cocina para probarlo.
11. Pero calló dentro de
la olla y cuando la
Cucarachita Martina
se dio cuenta de lo
que sucedió era muy
tarde.