1. “La vida no es la que uno vivió, sino la que uno recuerda, y como la recuerda para contarla”,
palabras del escritor colombiano Gabriel García Márquez con las cuales hoy puedo estar muy de
acuerdo. Puesto que mi vida se reduce a esta etapa maravillosa que ya esta culminando y la
recuerdo con un aprecio inmenso, al tiempo con una sensación de incredibilidad y esperanza
para el futuro.
En estos once años he crecido, he vivido realmente y he aprendido un sinfín de cosas que me
han ayudado y sustentado. Aprendí que no se puede dar marcha atrás, que la esencia de la vida
es ir hacia adelante, aprendí que en una clase de matemáticas hay que sentarse en la primera
fila, aprendí a guiarme por principios, por valores y a defenderlos aferrándome a ellos cuando
debía hacerlo, aprendí que todos somos diferentes pero cada uno valioso e indispensable para
ser un equipo, aprendí que la satisfacción del trabajo bien realizado no se compra con nada,
aprendí a vender y hacer negocios con dulces también aprendí que era ilegal en el colegio,
aprendí a tener paciencia, a saber que nosotros estábamos creciendo y el colegio igual, que si
nosotros errábamos el colegio tenia el derecho de equivocarse también, pero que aun así no nos
íbamos a dar por vencidos y que nuestra meta siempre a sido la excelencia.
Es curioso que conviviéramos tantos años, tantas horas, tantos momentos. Porque todos los
días, todo el día, una jornada extenuante, pero sin ustedes no hubiera sido razón de ser, sin
ustedes compañeros que son grandes personas, los cuales conocí y me conocieron, con los
cuales compartí pocos o muchos momentos, pero sin lugar a dudas quedaron grabados en mi
mente y corazón. Ahora es un poco extraño este cambio, este giro que nos da ya la vida y que
cada uno de nosotros se enfrenta con convicción y alegría, ojalá todos lo disfruten y no se
olviden del Ser que les da Todo nuestro Creador.
Y a Él a Jehová Dios, le doy las gracias primero que a nadie, porque “El hace que lleguen a ser
todas las cosas”, porque es nuestra altura segura y nuestro refugio en quien de veras hemos de
confiar, que nos tiene aquí con vida y recibiendo este galardón de la vida, que nos hace disfrutar
de ella y alcanzar sueños y metas.
A mis Padres que sin ellos tampoco hubiera sido posible vivir este momento de plena
satisfacción y emoción, gracias a ellos por darlo todo por mí, gracias a ellos por no rendirse,
gracias por ser las personas más importantes en mi vida y formarme con amor, con tanto amor,
creando ese vínculo perfecto de unión.
Gracias mil gracias a todas aquellas personas que hicieron parte de mi proceso de formación,
desde la directora hasta Aldemar. Gracias Alexandra por abrirme las puertas de este que, de
verdad se convirtió en nuestro segundo hogar y por la oportunidad de estudiar y de darnos una
educación de calidad y humana. Gracias a Alba y a todas las coordinadoras porque sin sus
regaños y exigencias quizás no seriamos los que hoy somos, gracias a mi titular Josué por ser él,
por sacarnos una carcajada a todos aun en los peores momentos y por explicarnos con tanta
paciencia y comprensión. Gracias a todos y cada uno de los mediadores que estuvieron conmigo
y me enseñaron durante todos estos años, los que hoy están y los que no, igual dejaron una
huella imborrable; su labor es más que eso, es un arte, el arte de enseñar, la paciencia que solo
Dios les da a ustedes es un don. Muchas gracias. Y que decir de las niñas y niños de once una ves
mas gracias también a ustedes de cada uno aprendí algo y estoy feliz de haberlos conocido y
convivido tanto tiempo, lo mejor para todos, muchos éxitos porque no podemos olvidar que ser
lo que somos y convertirnos en lo que somos capaces de ser es la única finalidad de la vida y
esto es lo que nos espera…
PROM 2011 LA HUELLA DE UNA GENERACION
LAURA MORA