Este documento contiene una colección de refranes populares españoles y sus traducciones al inglés. Los refranes ofrecen consejos breves y observaciones sobre la vida, como "Al mal tiempo, buena cara" sobre mantener una actitud positiva ante las dificultades, "No dejes para mañana lo que puedas hacer hoy" sobre la importancia de la diligencia, y "Más vale maña que fuerza" sobre la habilidad sobre la fuerza bruta.
1. Al mal tiempo, buena cara: Al mal clima, buen rostro.
Al que madruga, Dios le ayuda: Al que mañea, la divinidad le dará auxilio.
Cría cuervos y te sacarán los ojos: Alimenta cuervos y te extraerán las
pupilas.
El que avisa no es traidor: El que anuncia, no es infiel.
El que ríe el último, ríe mejor: El que se mofa el último, se mofa más
placidamente.
En boca cerrada no entran moscas: En labios sellados no penetran insectos
voladores.
La avaricia rompe el saco: La codicia rasga el fardo.
Más vale pájaro en mano que ciento volando: Mas vale ave en palma que un
centenar surcando los cielos.
Más vale prevenir que curar: Mas vale precaver que sanar.
No dejes para mañana lo que puedas hacer hoy: No abandones para mañana
lo que puedas realizar hoy.
No hay mal que por bien no venga: No hay daño que por beneficio no llegue.
Ojo por ojo, diente por diente: Iris por iris, incisivo por incisivo.
Aunque la mona se vista de seda, mona se queda: Aunque la simia se acicale
de seda, simia sigue siendo.
Cuanto más tienes, más necesitas: Cuanto más posees, más deseas.
De tal palo, tal astilla: De tal estaca, tal esquirla.
2. Más vale lo malo conocido que lo bueno por conocer: Más vale lo maligno
dominado que lo bondadoso por dominar.
Más vale maña que fuerza: Más vale desenvoltura que potencia.
Ojos que no ven, corazón que no siente: Pupila que no observa, alma que no
lamenta.
Quien tiene boca, se equivoca: Quien posee labios, se contradice.
A río revuelto, ganancia de pescadores: A torrente enmarañado, beneficio
de marineros.
A buen entendedor, pocas palabras bastan: A buen dialogador, escasos
vocablos convienen.
Afortunado en el juego, desgraciado en amores: Próspero en las apuestas,
desdichado en pasiones.
Cada oveja con su pareja: Cada cordero con su emparejamiento.
Cuando el río suena, agua lleva: Cuando el afluente retumba, H20
transporta.
Después de la tempestad, viene la calma: Después del gran temporal,
retorna el sosiego.
El dinero no da la felicidad, pero cuando se va se la lleva: La riqueza no da
el bienestar, pero cuando parte se lo lleva.
Hombre prevenido vale por dos: Varón precavido vale por un par.