Bruno llegó a Londres para estudiar psicología y conoció a Heaven, cuya familia estaba investigando el caso de Jack el Limpio, un asesino que mataba sin dejar rastros a diferencia de Jack el Destripador. Heaven pidió ayuda a Bruno para resolver el caso de Jack el Limpio y heredar. Después de visitar la mansión Okeford Manor, descubrieron mediante el uso de infrarrojos que un cuadro en una habitación cerrada mostraba que Alexander Howells era en realidad Jack el Limpio.