2. Gracias a la gran red global, los Museos tradicionales abren sus
puertas y expanden su accionar desarrollando páginas en las que es
posible acceder, además de información útil de orden organizativo, a
recorridos virtuales de sus galerías y a algunas de las valiosas obras
que ellas albergan.
Pero además, asistimos en la actualidad al desarrollo de entornos que
tienen una existencia exclusiva en el entorno digital: son los museos
digitales. Algunos de ellos, suelen ser páginas que albergan obras de
arte digital, con un mínimo potencial participativo. Otras apuestan a
ofrecer propuestas interactivas que enfatizan la acción del visitante
sobre el contenido.
El panorama no termina allí. Montándose en la idea de museos
digitales, se abren paso hoy los Museos escolares en Internet, como
una manera de documentar la acción y mirar el presente en
perspectiva histórica.
4. Permite ser visitado sin necesidad de desplazarse.
Es una opción especialmente idónea si nos encontramos lejos
del lugar donde se encuentra el museo real. Poder estar en un
museo de Miami, Tokyo o Sidney, haciendo únicamente un
clic, es hoy una realidad, o aquellas personas que por
enfermedad u alguna otra razón no pueden desplazarse.
Obviamente, esto no nos permite suplir la experiencia de una
visita real a dicho museo.
5. - Permite planificar una posible visita real. Muchas veces queremos viajar a
otro lugar y deseamos conocer las principales atracciones culturales del lugar.
A través de un simple clic, poseemos toda la información necesaria sobre el
museo en cuestión.
Centrando el tema desde una perspectiva didáctica
Facilita el acceso directo a la información.
· Facilita el intercambio entre ideas y experiencias entre y con los
profesionales del museo.
· Muestra de una manera interactiva las colecciones de un museo o las
potencialidades de un conjunto patrimonial.
· Ofrece actividades alternativas a las existentes en un museo real
7. Cada uno de ellos, museo real y museo virtual, puede y debe aportar
situaciones y experiencias distintas al visitante. A nadie se le escapa el hecho
que la experiencia que supone el contacto directo con las piezas o
colecciones de un museo es una vivencia insustituible. Cuando nos
desplazamos al museo, no sólo se trata de ir a ver una pieza de valor
incalculable. Hay que tener en cuenta también el entorno envolvente del
museo, el movimiento que realizamos entre sus salas, la posibilidad de
detenerme, observar, analizar, etc. Aunque esta es una experiencia propia del
museo real, existen muchos museos virtuales que se están esforzando para
que la experiencia que el visitante virtual tenga dentro de ellos sea, como
mínimo, memorable e irrepetible, la interactividad y la búsqueda de
implicación y participación por parte del usuario son las claves para
asegurarlo.
9. El museo virtual, en principio, podría actuar como recurso didáctico
dentro del aula. Así como el docente tiene a su alcance recursos
diversos como libros de texto, guías didácticas, juegos, mapas, etc.
para llevar a cabo su acción educativa dentro del aula, también debe
contar con entornos virtuales a partir de los cuales articular
propuestas didácticas que contemplen el trabajo de múltiples
objetivos y contenidos, existen muchos museos virtuales que ya
contemplan esta posibilidad y, por lo tanto, se configuran como
verdaderos recursos educativos, proponiendo actividades didácticas
on-line, permitiendo que el docente obtenga fichas didácticas sobre
los contenidos del museo u otros, potenciando debates virtuales
sobre un tema de actualidad, ofreciendo bases de datos temáticos
(de texto, imágenes y vídeo) sobre las colecciones del museo, etc.
10. Muchos de ellos poseen espacios específicos para los
docentes, ya sea ofreciendo materiales didácticos para
preparar el trabajo en el mismo museo virtual o como material
de soporte para el aula.
Por otra parte los museos virtuales pueden convertirse en
auténticos entornos de aprendizaje, más allá de la simple
utilización como material de consulta o como espacio para la
búsqueda de información. Muchos de los museos virtuales
existentes en la red pueden convertirse en verdaderos espacios a
partir de los cuales articular unidades didácticas.
11. Los museos virtuales pueden ser una herramienta muy útil
para trabajar con una metodología basada en los centros de
interés o el trabajo por proyectos. Tanto en educación
infantil, primaria como secundaria, los museos virtuales
ofrecen diversas posibilidades; todo depende, en gran parte,
del papel que pretenda atribuirse al museo virtual como
recurso educativo y como entorno de aprendizaje.
12. ¿Qué debo preguntarme al momento de utilizar un
museo virtual para mis alumnos?
Quiero que mis alumnos pasen un momento de diversión, exclusivamente,
o también quiero que adquieran cierta información que pueda serles útil?
- ¿Sé el contenido o tema que quiero trabajar o no tengo ningún tema
prefijado?
- ¿Qué pretendo conseguir con la visita al museo?
- ¿Articularé algún trabajo de investigación en torno a la información que
me presenta el museo o se tratará únicamente de deambular por sus
páginas?
- ¿Dirigiré la mirada del alumnado hacia algún punto en concreto o dejaré
que sean ellos mismos quienes dejen llevarse por aquello que más les
interese?
13. En fin son múltiples los beneficios que podemos obtener si
decidimos incorporar a los museo virtuales como herramientas de
trabajo con nuestros alumnos.
En un museo virtual podemos encontrar:
Texto con información acerca del museo
Breve reseña histórica del mismo
Colecciones
Actividades
Publicaciones y galería de imágenes entre otras.