1. Oración para pedir protección
Salmos 63 (Reina-Valera 1995)
“Dios, satisfacción del alma ¡Dios, Dios nuestro eres tú! ¡De madrugada te
buscaremos! Nuestra alma tiene sed de ti, nuestra carne te anhela, en tierra seca
y árida donde no hay aguas, para ver tu poder y tu gloria, así como te hemos
mirado en el santuario. Porque mejor es tu misericordia que la vida, nuestros
labios te alabarán. Así te bendeciremos en nuestras vidas; en tu nombre
alzaremos nuestras manos. Como de médula y de grosura será saciada nuestra
alma, y con labios de júbilo te alabará nuestra boca, cuando nos acordemos de ti
en nuestro lecho, cuando meditemos en ti, en las vigilias de la noche, porque has
sido nuestro socorro y así en la sombra de tus alas nos regocijaremos. Está
nuestra alma apegada a ti; tu diestra nos ha sostenido. Pero los que para
destrucción buscaron nuestra alma caerán en los sitios bajos de la tierra. Los
destruirán a filo de espada; serán presa de los chacales. Pero el rey se alegrará en
Dios; será alabado cualquiera que jura por él, porque la boca de los que hablan
mentira será cerrada”.
Salmos 72:18 (Reina-Valera 1995)
“Bendito Adonai Dios, el Dios de Israel, el único que hace maravillas”.
Confesión de fe
Señor Jesús yo creo firmemente que tu eres el Hijo de Dios. Tu eres el
Cristo, el Mesías que vino a deshacer toda obra del diablo, toda obra de maldad.
Diste tu vida en la cruz por mis pecados y resucitaste de entre los muertos. Padre
te confieso todos mis pecados, confieso haber andado por malos caminos,
haciendo lo que me gusta, confieso no haberte obedecido y pido perdón y me
vuelvo a ti en arrepentimiento.
Lávame, limpia mi conciencia con tu sangre. Creo que tu sangre me limpia
ahora de toda maldad, de todo pecado. Te pido que te quedes conmigo, en mi
corazón y seas dueño y Señor de mi vida. Saca, destruye, arranca de mi todo, todo

2. lo que impida que TÚ controles mi vida. Quiero ser gobernado, guiado, dominado
solo por Ti Padre Santo Altísimo.
Te confieso como mi único y verdadero Dios. Apártame para servirte,
amarte, obedecerte. Dedico y consagro a TI mi vida. Gracias por redimirme, por
limpiarme, por justificarme y santificarme, muchas gracias. TE AMO PADRE
SANTO. Amén.
Tomar toda la armadura de Dios
Tomo ahora el Yelmo de Salvación, calzo mis pies con el apresto del
Evangelio de la paz, me ciño el cinto de la verdad, tomo la Coraza de Justicia, y
tomo el Escudo de la fe, y la espada del Espíritu con que voy a pagar todos los
dardos de fuego del maligno. (Efesios 6:10-18).
Salmos 31:21 (Reina-Valera 1995)
“Bendito sea nuestro Padre Eterno, porque ha hecho maravillosa su
misericordia para conmigo en ciudad fortificada”. (En momentos de angustias).
Salmos 72:18 (Reina-Valera 1995)
“Bendito Adonai Dios, el Dios de Israel, el único que hace maravillas”.
Salmos 145:1-4 (Reina-Valera 1995)
“Te exaltamos, Dios, y Rey, y bendecimos tu nombre eternamente y para
siempre. Cada día te bendeciremos y alabaremos tu nombre eternamente y para
siempre. Grande es nuestro Dios y digno de suprema alabanza; su grandeza es
insondable. Generación a generación, celebrará tus obras y anunciará tus
poderosos hechos”.

3. Bendiciones bíblicas para nuestras vidas.
Génesis 49:25 (Reina-Valera 1995)
“por el Dios de nuestros padres, el cual nos ayudará, por el Dios
Omnipotente, el cual nos bendecirá con bendiciones de los cielos de arriba, con
bendiciones del abismo que está abajo, con bendiciones de los pechos y del
vientre”.
Salmos 5:12 (Reina-Valera 1995)
“Tú, Santo de Israel, bendecirás al justo; como con un escudo lo rodearás
de tu favor”.
Oración: gracias Señor por tu promesa, por tu bendición para nuestras
vidas. Por fe declaramos que somos justos delante de ti, que hacemos obras de
justicia que complacen tu corazón. Prospera estas promesas en nuestras vidas.
Salmos 67:6 (Reina-Valera 1995)
“La tierra dará su fruto; nos bendecirá Dios, el Dios nuestro”.
Isaías 33:6 (Nueva Versión Internacional)
“Él será la seguridad de tus tiempos, te dará en abundancia salvación,
sabiduría y conocimiento; el temor del Señor será tu tesoro”.
Oración: Amado Señor Jesús: esta es la promesa más reconfortante para
todos los que creemos en ti, es la promesa maravillosa de que nada nos pasara
que no esté dentro de tus planes, de tus pensamientos, dentro de tu voluntad.
Padre, ahora te entregamos nuestro futuro, planes, decisiones, proyectos todo,
todo nuestro futuro. Haz con él, como quieras. Traza un camino para nosotros y
sobre todas las cosas, libera nuestra voluntad para poder cumplir TU voluntad en
nuestras vidas.

4. También recibimos, tomamos, arrebatamos ahora, de los cielos, en
abundancia: salvación, sabiduría, conocimiento lo cual nos ayuda a ser como tú
quieres que seamos. Y siempre sea nuestro tesoro el temor de Dios. Amén. Amén.
Jeremías 29:11-14a (Reina-Valera 1995)
“Porque yo sé los pensamientos que tengo acerca de ustedes, dice el Señor,
pensamientos de paz y no de mal, para darles el fin que esperan. Entonces me
invocaran. Vendrán y oraran a mí, y yo los escucharé. Me buscaran y me hallaran,
porque me buscaran de todo corazón. Seré hallado por ustedes, dice nuestro Dios
Adonai”.
Oración: Creemos con todo nuestro corazón, que así lo harás Señor, que
cumplirás esta promesa en nuestras vidas. Esperamos en ti, esperamos en ti,
creemos que te hallaremos, porque nuestro corazón esta desesperadamente
anhelante de ti, sediento de ti. Te hallaremos, porque te hemos buscado con todo
nuestro corazón y nos darás el fin que esperamos, toda nuestra esperanza está en
ti. Amén. Amén.
Isaías 35:8 (Reina-Valera 1995)
“Y habrá allí calzada y camino, el cual será llamado Camino de Santidad. No
pasará por allí ningún impuro, sino que él mismo estará con ellos. El que ande por
este camino, por torpe que sea, no se extraviará”.
Oración: invocamos tu ayuda Señor Jesús, para poder andar por el camino
de santidad, por sendas derechas, caminos de rectitud. Suplicamos que ahora
vengas en nuestra ayuda, tu ayuda poderosa, que nunca permitirá que nos
desviemos a derecha, ni a izquierda.
Isaías 43:2 (Reina-Valera 1995)
“Cuando pasemos por las aguas, TÚ estarás con nosotros; y si por los ríos,
no nos anegarán. Cuando pasemos por el fuego, no nos quemaremos ni la llama
arderá en nosotros”.

5. Oración: Esta palabra la tomamos como promesa para nuestras vidas, que
ningún peligro, dificultad o problema será tan grande que pueda sobrepasarnos o
prevalecer. No hay nada, nada, nada que podrá vencernos, desanimarnos,
hundirnos, porque, por medio de Ti Señor Jesús, somos más que vencedores.
Nunca el temor se apoderara de nosotros y lejos de nosotros estará la
opresión, el escándalo, la traición, el descredito, la humillación, la vergüenza en el
poderoso nombre de Jesús. Y todo plan de Satanás para nuestras vidas queda
frustrado, deshecho, seco ahora, ahora, nunca prosperara ningún plan de Satanás
para nuestras vidas, en el poderoso nombre de Jesús. Amén.
Isaías 54:17 (Reina-Valera 1995)
“Ninguna arma forjada contra nosotros prosperará, y condenaremos toda
lengua que se levante contra nuestra en el juicio. Esta es la herencia de los siervos
del Altísimo Santo de Israel: su salvación de mí vendrá, dice nuestro Padre
Adonai”.
Salmos 91:9-11 (Reina-Valera 1995)
“Porque hemos puesto al Señor, que es nuestra esperanza, al Altísimo por
nuestra habitación, no nos sobrevendrá mal ni plaga tocará nuestra morada, pues
a sus ángeles mandará acerca nuestro, que nos guarden en todos nuestros
caminos”.
Oración: Padre Santo Altísimo: gracias por tu promesa, que hoy la
tomamos. Estos son tiempos de plagas, pestes, calamidades, desastres naturales,
pero como habitamos bajo tu abrigo y moramos bajo tu sombra, no nos alcanza
peste, plaga, ni mortandad, esa es tu promesa. NUNCA LLEGA A MI HOGAR, NI A
MI FAMILIA EL VIRUS AH1N1 de la influenza, ahora lo alejo de nuestras vidas, de
la vida de mis hijos, la de mi familia, alejo esta peste, esta epidemia, esta
pandemia , en el nombre de Jesús. De acuerdo a tu promesa del Salmo 91:10-11.
Gracias porque esta promesa es nuestra Señor.
Lejos estén siempre de nosotros, mortandad, plagas, pestes, epidemias,
pandemias, desolación. Lejos estén siempre de nosotros el asolamiento, hambre,
lejos estén siempre de nosotros. Nunca nos alcanzan, lo profetizamos en el

6. poderoso nombre de Jesús. Sea prosperada esta promesa del salmo en mi vida. Y
otra vez: no nos alcanza mortandad que en medio del día destruya.
No nos alcanzan guerras, violencia, conflictos armados, no nos alcanzan
masacres, atentados terroristas, tragedias, nunca nos alcanzan, porque habitamos
al abrigo del Altísimo y moramos bajo la sombra del Omnipotente, no nos
sobrevendrá el mal, ni plaga tocara nuestra morada. Y otra vez: no nos alcanza
mortandad que en medio del día destruya, no nos alcanzan huracanes, tornados,
inundaciones, terremotos, incendios.
¡Esperanza y Castillo nuestro, nuestro Dios en quien confiamos!! Bendito
sea tu Santo Nombre. Gracias porque nos escuchaste. Amen y amen.
Nuestro Padre Santo nos defiende.
Salmos 27:3 (Reina-Valera 1995)
“Aunque un ejército acampe contra mí, no temerá mi corazón; aunque
contra mí se levante guerra, yo estaré confiado”.
Oración: Amen, Así será nuestra confianza para contigo Señor, porque
sabemos que en el momento que más necesitados estemos, tu estarás allí con
nosotros para salvarnos y defendernos de todo mal, de toda destrucción, de todo
engaño, es nuestra confianza de todo corazón en ti. Amén. Amén.
Salmos 34:7 (Reina-Valera 1995)
“El Ángel del Señor, acampa alrededor de los que lo temen y los defiende”.
Oración: suplicamos siempre tu defensa Señor, cada día, cada momento de
nuestras vidas, necesitamos de tu defensa de todo peligro, engaño, del perverso.
Suplicamos tu defensa de toda violencia, también de los saqueadores,
depredadores y asesinos.
Salmos 119:154 (Nueva Versión Internacional)
“Defiende nuestra causa, rescátanos; danos vida conforme a tu promesa”.

7. Salmos 72:12 (Nueva Versión Internacional)
“Él librará al indigente que pide auxilio, y al pobre que no tiene quien lo
ayude”.
1 Reyes 5:4
“Pues bien, ahora el Señor mi Dios me ha dado paz por todas partes, de
modo que no me amenazan ni adversarios, ni aflicciones, ni calamidades”.
Oración: defiéndenos y líbranos Señor de todo mal, defiéndenos del azote
de la lengua, defiéndenos del engañador, del saqueador, de toda violencia, del
falso testimonio, del descredito, del maltrato, el dolor, la vergüenza y la
humillación.
Defiéndenos y líbranos de la pobreza, de la escasez, del fracaso y la ruina.
Te necesitamos, Padre Eterno, fiel y verdadero, nunca te alejes de nosotros.
Además, defiéndenos de pecar, de ser mal testimonio para tu reino. Es nuestra
esperanza. En el poderoso nombre de Jesús. Gracias Padre Santo porque tu ya has
escuchado nuestra oración y guardas nuestra vida y la de los nuestros
protegiéndonos. Gracias por tu liberación, Dios nuestro te amamos. Amén.
EL GRAN obstáculo en las Oraciones.
Antes de comenzar con cualquier tipo de oración en Guerra Espiritual, es
SUMAMENTE IMPORTANTE, que TODOS en la familia hagan un compromiso de no
hablar quejas, insultos, críticas, griterías, reclamos, derrota, amargura, sino que
CAMBIE el lenguaje familiar de maldición a BENDICION. Los pleitos, las griterías,
las contiendas, los desacuerdos y la intolerancia deben desaparecer PARA
SIEMPRE del hogar de lo contrario todo será un gran fracaso. De ahora en
adelante cambiara el lenguaje a lenguaje de BENDICION y se declarara la victoria
de Dios en el lenguaje cotidiano. Si el ambiente de pleito y contienda, y amargura
continúan en el hogar, DE NADA SERVIRAN LAS ORACIONES.
Tener un lenguaje negativo, pesimista o de maldición DESACTIVA las
oraciones de poder. Los cristianos que oran a Dios por una situación y declaran

8. victoria y luego más tarde expresan negativismo, amargura, pesimismo, derrota,
maldición, en su lenguaje cotidiano, NUNCA, verán contestadas sus oraciones, por
esto es que hay muchos cristianos que por años oran por una situación que nunca
se resuelve. El lenguaje que utilizamos para orar debe estar en CONCORDANCIA
con nuestro lenguaje cotidiano.
Un pensamiento de C. Peter Wagner: "Me parece a mí que ciertos
cristianos tienen la habilidad de orar regularmente durante largos periodos y
obtienen respuestas frecuentes y especificas a sus oraciones en MUCHO MAYOR
GRADO, de lo que se espera del cristiano promedio".
Ruego a Dios hermana(o) que puedas meterte en la oración, por buen
periodo de tiempo y ames la oración y veras cosas sorprendentes ocurrir en tu
vida.