El documento habla sobre el creciente problema de la adicción a las redes sociales, especialmente entre los jóvenes. En Italia se han abierto dos clínicas para tratar esta patología, conocida como Internet Addiction Disorder, cuyos síntomas son similares a los de la adicción a estupefacientes. Las redes sociales permiten interactuar con otras personas online aunque no se las conozca personalmente, y cada nuevo miembro que se une transforma y afecta la dinámica del grupo.