2. La adolescencia es un
periodo en
desarrollo biológico,
psicológico, sexual y social
inmediatamente posterior a
la niñez y que comienza
con la pubertad.
3. Es bien sabido que la adolescencia es
una etapa de cambios, con continuos
conflictos que el adolescente debe
superar tomando decisiones que no
siempre sabe en qué van a desembocar;
sintiendo la necesidad de experimentar
todo aquello que le suscita interés.
Es un intento de búsqueda de
identidad, una necesidad de formarse
como seres únicos buscando una
autonomía que les haga sentir fuertes
ante la incertidumbre del crecer.
Por ello, no es de extrañar que en
ocasiones la adolescencia sea dura tanto
para el joven que la vive como para sus
padres.
4. La adolescencia implica
fuertes cambios, ya sean
físicos o emocionales para
los propios adolescentes
como para la relación y
organización familiar.
5. Los principales cambios físicos
de la adolescencia son, por una
parte, cambios en el aparato
reproductor, en las mamas de
las niñas y en los genitales de
los niños; la aparición de vello
corporal y un período de
crecimiento rápido que dura
entre 3 y 4 años.
6. Las emociones del adolescente
a veces parecen exageradas.
Sus acciones son
inconsistentes. Es normal que
los adolescentes cambien
repentinamente de estado
emocional, entre la felicidad y la
tristeza, entre sentirse
inteligentes o estúpidos.
7. *Adolescentes Tímidos
El joven muy tímido tiene mucho
miedo de llamar la atención, a que
se fijen en lo que hace o dice.
Teme cometer errores y hacer el
ridículo y cree que los demás le
prestan atención porque inspira
pena. El peor sufrimiento para un
adolecente tímido se produce
cuando nota que los demás se han
enterado de su timidez o aprieto.
8. Los científicos encontraron la
respuesta de por qué los
adolescentes son altamente
irritables, y al parecer se debe a
que sus cerebros se desarrollan
más lento que sus cuerpos, con
lo cual los especialistas afirman
que la culpa es de las
hormonas.
9. Es habitual que los adolescentes no
se comporten siempre como sus
padres o la sociedad espera, pero no
por ello deben ser estigmatizados
como seres antisociales. La
adolescencia y la rebeldía son
términos directamente relacionados;
está en su naturaleza de adolescente
ser rebelde.
No obstante, que la rebeldía sea
habitual en la adolescencia no quita
importancia al hecho de que ésta, en
grandes dosis llega a ser preocupante
para los padres.