2. Una especie endémica (también llamadas especies
microareales), es aquella especie o taxón (puede ser un género
por ejemplo) que está restringido a una ubicación geográfica muy
concreta y fuera de esta ubicación no se encuentra en otra parte.
La extensión geográfica puede ser muy variable habiendo
especies endémicas de una población determinada o de una
provincia, país,... (ej. plantas endémicas de Australia, o plantas
endémicas de Ibiza, igualmente hay anfibios endémicos en
Baleares, insectos y aves - por ejemplo.). El endemismo surge
como consecuencia de la especiación que se provoca ante la
aparición de barreras naturales que impiden el intercambio
genético, de este modo, aparecen especies diferentes restringidas
a esas zonas geográficas. Estas especies son más vulnerables a la
extinción pues sus poblaciones suelen ser reducidas en número
de individuos y por tanto su respuesta genética ante el cambio de
las condiciones naturales es menor.
3. En biogeografía, una especie nativa, especie indígena o autóctona es una
especie que pertenece a una región o ecosistema determinados. Su
presencia en esa región es el resultado de fenómenos naturales sin
intervención humana. Todos los organismos naturales, en contraste con
organismos domesticados, tienen su área de distribución dentro de la
cual se consideran nativos. Fuera de esa región si son llevadas por los
humanos se las considera especies introducidas.
Por ejemplo la hormiga argentina Linepithema humile es una especie
nativa de Argentina, Uruguay, Paraguay y sur de Brasil. Fue llevada
accidentalmente a otros lugares del mundo, incluyendo
África, Europa, Australia, Nueva Zelanda, Japón y Norteamérica, donde
se ha establecido como especie introducida.
Una especie nativa no es necesariamente endémica. En biología y
ecología endémico quiere decir nativo exclusivamente de una biota
específica. Una especie indígena puede ocurrir en más de un local. Por
ejemplo dos especies de grullas africanas, la Anthropoides paradisea o
grulla del paraíso es nativa y endémica del sur de África, mientras que la
grulla Bugeranus carunculatus o grulla carunculada es nativa del sur y
norte de África. La última tiene una distribución más amplia, por
4. Especies animales o vegetales aclimatadas en un
ambiente que no es el suyo. Pero a diferencia de la
simple aclimatación, la especie naturalizada se
mantiene por ella misma, sin la ayuda del
hombre, como si fuese una especie indígena.
5. Una especie introducida, especie foránea o especie exótica
es una especie de organismos no nativos del lugar o del
área en que se los considera introducidos, y han sido
accidental o deliberadamente transportados a una nueva
ubicación por las actividades humanas. Las especies
introducidas pueden dañar o no el ecosistema en el que se
introducen, alterando o no el nicho ecológico de otras
especies. Si una especie resulta dañina, produciendo
cambios importantes en la composición, la estructura o los
procesos de los ecosistemas naturales o
seminaturales, poniendo en peligro la diversidad biológica
nativa (en diversidad de especies, diversidad dentro de las
poblaciones o diversidad de ecosistemas) entonces es
denominada especie invasora. Debido a sus impactos en
los ecosistemas donde han sido introducidas tales especies
son consideradas ingenieros de ecosistemas
6.
En el mundo se pierde cientos de miles de especies, muchas de ellas aún
antes de ser descubiertas por la ciencia. De ese modo, no sólo se pierde
la variabilidad biológica, sino además la diversidad genética, fuentes de
sustentos para las generaciones futuras. Una especie en peligro de
extinción es una especie que puede extinguirse en un futuro próximo. A
través de la historia de la evolución, millones de especies han
desaparecido debido a procesos naturales. En los últimos 300 años, sin
embargo, los humanos han multiplicado la tasa de extinción por mil.
Para todas las especies naturales, vegetales y animales, vivir constituye
un peligro cotidiano, deben cuidarse de sus congéneres, especialmente
del más poderoso predador que existe sobre la Tierra: el hombre. Los
desastres ecológicos, la deforestación y otras consecuencias de la acción
humana provocan daños en la cadena trófica. En el mundo actual la
extinción de especies animales no está tan directamente relacionada con
la escazes de alimentos o la contaminación, como con acciones violentas
directas (la caza no reglamentada y el comercio ilegal de especies
salvajes) o indirectas (la introducción de especies exóticas, en
determinados ambientes, que compiten por uno o más recursos con
individuos nativos o ya adaptados al lugar).