El presidente de Derwick Associates, Alejandro Betancourt López, ha afirmado, en unas declaraciones concedidas a la revista española ‘Sector Ejecutivo’ que la Compañía está trabajando para consolidarse “en el ámbito energético de América Latina con una buena presencia en países de la región. Una empresa reconocida que da respuestas reales, tanto en proyectos de ingeniería, procura y construcción de plantas eléctricas, como en todo lo que se refiere a operación y mantenimiento de centrales”.

1. empresas
Alejandro Betancourt, presidente de Derwick
“Somos
una compañía
de servicios integrales en
el campo energético”
Arturo Díaz
Derwick brinda soluciones que van
desde el suministro de equipos para
plantas termoeléctricas hasta la construcción, provisión e instalación de
centrales, pero también transfieren
tecnología y realizan trabajos de operación y mantenimiento con vocación
de seguir creciendo y consolidarse.
Han desarrollado intensamente su actividad en Venezuela y su presidente,
Alejandro Betancourt, nos explica las
ventajas y desventajas que están encontrando en ello.
Derwick es una empresa joven que
ha desarrollado importantes proyectos de plantas termoeléctricas en Venezuela a lo largo de los últimos
años. ¿Qué les impulsó a poner en
marcha la compañía?
Desde que terminé mis estudios en
Boston, USA quise involucrarme en el
sector energético que, como sabe, es el
principal motor de la economía venezolana.
Tras graduarme, empecé a trabajar con
la representante y agente en Venezuela
de Kawasaki Heavy Industries, que suministraba turbinas eléctricas a la industria petrolera venezolana. Allí comencé a informarme sobre la estructura
y el funcionamiento de la generación
eléctrica en Venezuela, y fue entonces
cuando, junto a mi hoy socio Pedro
Trebbau, y otras personas extraordinariamente preparadas, empezamos a
evaluar la posibilidad de poner en marcha un proyecto empresarial. Como
contábamos con las capacidades técnicas y las alianzas estratégicas con los
proveedores, en el año 2003 tomamos
la decisión de constituir la primera
Derwick.
Las necesidades eléctricas de la industria petrolera y la grave sequía que
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afrontó Venezuela entre 2009 y 2010,
consecuencia del fenómeno climático
de El Niño, impulsaron el rápido crecimiento de Derwick. Frente a la escasez
de energía, el gobierno venezolano se
vio en la necesidad de establecer un
mecanismo para ampliar con suma urgencia el parque eléctrico del país y diversificar las fuentes de generación.
Sin embargo, las características de la
propuesta y los tiempos de ejecución
demandados hicieron que la respuesta

2. empresas
por parte de las multinacionales no fuera la esperada, por lo que el gobierno
recurrió a empresas locales que tuvieran mayor capacidad de adaptación a
los requerimientos. Fue en ese momento cuando Derwick, entre otras empresa, dio un paso adelante, asumió el reto
y puso a disposición de los proyectos
las máquinas de su inventario.
Asegurada la compra de los equipos,
los responsables gubernamentales se
dirigieron nuevamente a las multinacionales para que aportaran los técnicos necesarios para la instalación y la
puesta en operación de las plantas. Las
negociaciones, sin embargo, no terminaron en acuerdo, por las duras condiciones de pago que imponían las compañías invitadas. Fue entonces cuando
los mismos clientes plantearon que, dado que Derwick había aportado los
equipos, fuéramos nosotros también los
que ejecutáramos los proyectos.
Fue así como en un plazo de dos años
la empresa logró contratos y probó su
capacidad. Hoy en día, hemos ejecuta-
do once contratos de ingeniera, construcción y puesta en operación de plantas termoeléctricas, cuya capacidad instalada total suma 1.216 MW, que suponen beneficios claros para más de
800.000 familias.
¿Cuáles cree que son los principales
atributos de Derwick?
En primer lugar, destacaría el trabajo
en equipo. Un equipo conformado por
gente joven, pero con una gran preparación. Personas esforzadas por hacer
las cosas bien, muy comprometidas
con la empresa. Saben la importancia
que tiene todo lo que hacen. La fuerza,
el ímpetu del equipo, ha sido y es muy
grande.
Hemos sido capaces de buscar e incorporar a los especialistas y técnicos (nacionales y extranjeros) más capaces para ejecutar los proyectos de forma exitosa, salvando las dificultades propias
que siempre existen en este tipo de proyectos.
Otro atributo qué destacaría es la energía y el empuje que tiene Derwick para
crecerse ante las adversidades. No tener miedo a los desafíos y afrontar los
retos con una meta clara: responder a
las expectativas de los clientes y cumplir los compromisos.
Después de la reunión que ha mantenido recientemente en Madrid con
Eduardo Montes, presidente de la
patronal eléctrica española, UNESA,
¿qué oportunidades de inversión
cree que hay en el sector eléctrico español y que le puede aportar Derwick?
Efectivamente, nos reunimos con el
presidente de UNESA porque España
es un país que ofrece oportunidades.
Nosotros trabajamos en el sector eléctrico venezolano y competimos y colaboramos con empresas españolas en él.
Tenemos interés en la internacionalización de nuestras actividades y España
ofrece ciertos atractivos de inversión.
Queríamos explorar la situación del
sector eléctrico español y ver qué posibilidades reales pueden existir en el
corto y medio plazo. De ahí que quisiéramos mantener un encuentro con el
representante de la patronal eléctrica.
Al margen de las inversiones, creo que
nuestra presencia en América Latina, la
apuesta que queremos hacer allí, puede
abrir las puertas a la colaboración con
las empresas españolas.
Cuentan con una oficina en España
desde 2010, que es la responsable del
desarrollo de la estrategia en el mercado internacional. ¿Cuáles son sus
planes de expansión?
Derwick es una empresa a la que le
gustan los desafíos y en nuestro plan
estratégico consideramos internacionalizarnos, por lo que, efectivamente, estamos evaluando oportunidades que
nos permitan avanzar en nuestro proyecto empresarial. En concreto, España
y Chile son dos países en los que hay
oportunidades de inversión atractivas,
aunque aún no hayamos tomado una
decisión concreta.
Usted ha apostado por desarrollar
intensamente la actividad de Derwick en Venezuela. ¿Qué ventajas y
qué desventajas están encontrando
en ello?
El sector energético, que es muy intensivo en el uso de energía eléctrica en
sus procesos productivos, es el principal motor de la economía venezolana y,
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3. empresas
por tanto, una empresa local
como Derwick, que cuenta
con equipos técnicos altamente cualificados, conocimientos
y una gran experiencia, posee
una ventaja competitiva muy
destacable.
Una desventaja que se afronta
en Venezuela para cualquiera
que desee entrar en este sector
es la competencia, es fuerte, lo
que para nosotros, lejos de ser
un inconveniente, constituye
un elemento que nos anima a
superarnos, a ampliar nuestra
cartera de servicios, a ser mucho más exigentes en términos
de calidad, y, sobre todo, entender y conocer bien a nuestros
clientes para adelantarnos y
adaptarnos a sus necesidades.
Esa es una clave vital para este
mercado.
Una vez concluidos sus once proyectos termoeléctricos en su país, ¿hacia
dónde apunta el proyecto empresarial de la compañía?
Actualmente tenemos en marcha un
muy ambicioso proyecto, como es el
mayor Centro Tecnológico de Turbinas
de Latinoamérica, enfocado en la investigación tecnológica, reparación y
mantenimiento de máquinas aero derivativas e industriales, fabricación de
repuestos y capacitación de mano de
obra especializada.
En Derwick nuestra misión es ser visionarios en nuestro sector y buscar
siempre estar un paso delante de las necesidades del mercado. Esa fue y creemos que siempre será la clave en nuestro éxito.
Uno de los proyectos que ha citado es
el Centro Tecnológico de Turbinas
(CTT) ¿En qué consiste y qué va a
aportar a Venezuela?
El CTT, en el que invertimos más de
40 millones de dólares, es una iniciativa pionera e innovadora en Latinoamérica que pusimos en marcha el año
2011, con dos objetivos fundamentales:
En primer lugar, queremos dar respuesta a la necesidad que tiene la industria
eléctrica y petrolera de Venezuela de
disponer de una asistencia técnica expedita, en cuanto al acceso a los repuestos e inmediatez en las reparaciones, reduciendo al máximo tanto los
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tiempos de espera y de reposición de
los equipos, como los elevados costos
que en la actualidad tienen que asumir
las empresas.
Y, en segundo término, poner a disposición del sector los especialistas, sus conocimientos y la experiencia acumulada en Derwick, para transferir tecnología y formar a técnicos locales que cubran la demanda de expertos por parte
de la industria eléctrica y petrolera.
El CTT se concibe, además, con un
centro de exportación de tecnología
avanzada y solución de necesidades en
toda la región, impulsando la capacidad productiva y técnica venezolana en
el mercado latinoamericano, tomando
ventaja de mecanismos como el Alba y
Mecosur. Al mismo tiempo, como un
centro de investigación tecnológica para el sector.
La actividad de Derwick ha sido
puesta en cuestión. De hecho, desde
algunos sectores se dice que ustedes
han recibido el favor del Gobierno
venezolano y les han otorgado once
contratos sin tener experiencia. ¿Qué
opinión le merecen estas críticas?
Cada uno es libre de opinar lo que
quiera, pero debe hacerse con rigor y,
por tanto, ciñéndose a los hechos. Si
bien es cierto que Derwick era una empresa poco conocida cuando se le adjudicaron los contratos, también lo es
que, precisamente por los riesgos y la
responsabilidad que asumía la
empresa, su prioridad número
uno fue contar con la gente
más experimentada y rodearse
de los equipos técnicos más
cualificados, que aseguraran
un estricto y riguroso cumplimiento de los compromisos
que asumimos con nuestros
clientes.
Lo que habría que preguntarse es dónde estaban en 2009,
en plena emergencia eléctrica en Venezuela, las multinacionales conocidas y con larga trayectoria. O qué precios
y garantías exigieron al Gobierno para aceptar los mismos riesgos y retos que asumieron algunas empresas locales, como fue el caso de
Derwick, no tan conocidas
como las grandes multinacionales.
La prueba más evidente de que esas
críticas eran infundadas es que hemos
entregado, las once plantas termoeléctricas que nos adjudicaron, brindando
un servicio del más altísimo nivel tanto
pre entrega como post entrega, contribuyendo así a incrementar la capacidad
instalada total del país en 1.216 megavatios y a mejorar la garantía de suministro del sistema eléctrico nacional.
¿Cuál cree que es la ‘foto’ de Derwick en 2020?
Quisiéramos que Derwick fuera una
compañía consolidada en el ámbito
energético de América Latina con una
buena presencia en países de la región.
Una empresa ampliamente reconocida
y buscada por nuestros clientes, que da
respuestas reales a sus necesidades,
tanto en proyectos de ingeniería, procura y construcción de plantas eléctricas, como en todo lo que se refiere a
operación y mantenimiento de centrales.
Nos gustaría mantener y ampliar un
equipo de profesionales altamente cualificados y aprovechar las indudables
ventajas que va a ofrecer el CTT para
formar especialistas que puedan ser exportados por toda América Latina.
Además, nos gustaría contar con una
presencia relevante en Europa, aprovechando los lazos que nos unen con España y a través de la colaboración con
las empresas de este país ■