2. Los jóvenes adultos de hoy día son nuestro futuro. Sus energías, lide- razgo y
sabiduría configurarán el mundo en este nuevo siglo. Se oca- paran de nuestra
generación a medida que envejecemos más y sustentarán a la siguiente generación.
Por consiguiente, la protección de su buena salud tiene vital importancia para todos
nosotros. En todo país se necesitan programas y estrategias eficaces para proteger la
salud reproductiva de los adultos jóvenes, pero son especialmente urgentes para los
jóvenes de los países en desarrollo.
En todo el mundo, millares de mujeres jóvenes mueren cada año por complicaciones
debidas a embarazos no planificados, y muchas de esas muertes se deben a abortos
clandestinos. Y en 18 países africanos, se prevé que una tercera parte de las
quinceañeras actuales se infectarán con el VIH durante sus vidas adultas y morirán a
causa de esta terrible enfermedad.
3. Jóvenes
"Los jóvenes de hoy en día"
Hoy en día, a los jóvenes se nos acusa de muchos aspectos en los que no solamente nosotros
tomamos parte de ello. Son muchas las veces en las que somos tratados como inmaduros e
irresponsables, mientras nosotros nos consideramos más bien incomprendidos.
A cada uno le ha tocado vivir su juventud en una determinada sociedad, y por suerte o por desgracia a
los jóvenes de hoy en día nos ha tocado vivir en ésta, donde las cosas cambian continuamente y todo
se renueva antes de que te puedas dar cuenta. Las puertas se nos abren cada día a nuevos mundos
donde nos tocará decidir que papel queremos tomar en ese juego y ahí es donde cada uno elegirá que
camino seguir
Entre los jóvenes hay de todo, pero como en todo lo demás, no se puede generalizar y hablar de “los
jóvenes de hoy en día” como un todo. Hay que saber distinguir y diferenciar.
Nosotros también trabajamos y luchamos por nuestro futuro, no somos solamente una “cuadrilla de
gamberros” que solo piensan en salir de fiesta y hacer “botellón” para manchar las calles. Seguro que
habrá cosas que haremos mal, pero no es justo que seamos criticados solo por los aspectos de
nuestras vidas que los “críticos” consideren.
Una buena opción sería tratar de ponernos en la situación del prójimo para entenderla mejor, tanto unos
como otros, de tal forma que todos podríamos juzgar con más justicia.
4. Jóvenes de entre 11 y 18 años. La razón es que existen varios proyectos en la ciudad de
Quito para los niños pequeños, pero casi ninguno para acompañarlos en la vida activa
(proyectos de formación).
No hay un tipo de jóvenes de la calle. Las condiciones de vida de estos jóvenes son muy
diversas, con un punto en común, pasar la mayor parte de su día en la calle, ya sea para
trabajar, pasear, jugar o incluso dormir. La mayoría de los jóvenes de la calle buscan
mantener contacto con algunas personas de su familia.
5. Una pandilla (de panda, reunión de
personas, derivado del latín pandus, curvado) es
un grupo de personas que sienten una relación
cercana, o íntima e intensa entre ellos, por lo cual
suelen tener una amistad o interacción cercana
con ideales o filosofía común entre los
miembros. Este hecho les lleva a realizar
actividades en grupo, que puede ir desde salir de
fiesta en grupo hasta cometer actos violentos o
delictivos. También puede ser utilizado como
sinónimo de trampa.[2] En algunos países como
El Salvador, Honduras, y Guatemala, también se
utiliza el término